Las fuerzas internacionales vigilarán las aguas y el espacio aéreo de Líbano

El Gobierno de Israel puso fin a media tarde de ayer al bloqueo aéreo y marítimo que desde hace ocho semanas mantenía sobre Líbano para impedir el rearme de la milicia chií de Hezbolá. El Ejecutivo israelí accedió el miércoles a levantar el bloqueo con la garantía de las fuerzas internacionales de que vigilarán estrechamente las aguas libanesas. Buena parte de los habitantes del País de los Cedros han visto la reapertura por mar y aire como el verdadero fin de la guerra, después del alto el fuego del pasado 14 de agosto.

La televisión pública israelí anunció anoche que el Gobierno de Ehud Olmert tiene previsto retirar las tropas que aún permanecen en el sur de Líbano antes del 22 de septiembre, cuando se conmemora el año nuevo judío.

Mientras, las autoridades de Líbano calcularon que el país ha perdido hasta 40 millones de euros diarios sólo en intercambios comerciales por el bloqueo israelí.

En los puertos de Sidón y Tiro, los principales al sur de Beirut, los pescadores recibían la noticia del fin del embargo con cierta indiferencia. Para ellos, la posibilidad de salir a faenar llega tarde: los meses en los que más dinero ganan son julio y agosto, época en que la pesca, sobre todo de sardinas, es abundante. En esas ocho semanas, que coincidieron con la guerra y el bloqueo que Israel mantuvo tras el cese de las hostilidades, los pescadores dejaron de ganar unos 3.000 euros. Ahora empieza la temporada baja y los ingresos no alcanzarán ni un tercio de esa cantidad al mes.

"Aunque levanten el bloqueo, nosotros no saldremos a pescar de inmediato. No nos fiamos de los israelíes y más vale pasar más penurias a que nos maten", dice Yihad Ashmar en su nombre y en el de sus compañeros, con los que pasa el tiempo charlando en el puerto de Tiro, donde la cansina actividad de un puerto mediterráneo ha sido reemplazada por el intenso ajetreo de los vehículos de Naciones Unidas que, bajo mando italiano, desembarcaron hace una semana. El bloqueo naval israelí se irá levantando gradualmente, a medida que las fuerzas internacionales tomen posiciones frente a la costa libanesa. Navíos alemanes serán, en principio, los que se encargarán de la vigilancia, pero hasta que lleguen, en unas semanas, buques de Francia, Italia, Grecia y el Reino Unido asumirán esa función. El control del aeropuerto también recaerá, según informaciones de los medios israelíes, en expertos alemanes.

Los responsables de la Asociación de Pescadores de Sidón dicen que esperan el permiso del Ejército libanés para echarse a la mar. No saben cuándo se lo darán pero tampoco parecen muy preocupados. Matan el tiempo desenredando alguna red en la cochambrosa sede de la asociación, donde cuelga más de un retrato del ex primer ministro Rafik Hariri, asesinado en febrero de 2005. El administrador de la asociación, Ibrahim Al Naib, dice que Hezbolá ha dado a cada pescador del sur unos 220 euros en compensación por las pérdidas y que esperan recibir más dinero del grupo islamista. Del Gobierno libanés, en cambio, no espera gran cosa. Hay unos 500 pescadores en Sidón, un centenar de ellos palestinos, y no han hecho nada en dos meses. El sector es importante para la economía de la localidad y ésta, según el pescador Alí Husein Hosho, se ha resentido mucho por la guerra y el bloqueo.

Las autoridades libanesas han calculado que el bloqueo ha hecho perder al país unos 40 millones de euros diarios sólo en intercambios de mercancías, según informó la televisión local. Ello sin contar las pérdidas del sector pesquero ni los 800 millones de euros que el país esperaba recibir del turismo este verano. Para dar un poco de esperanza, la televisión no tardó en mostrar los primeros aterrizajes de aviones comerciales en el aeropuerto de Beirut pasadas las seis de la tarde (una hora menos en la España peninsular), hora en que la medida entró en vigor.

Una de las primeras aeronaves pertenecía a la compañía de bandera kuwaití, cuyos pilotos se apresuraron a colgar banderas libanesas de sus ventanillas una vez detenido el aparato en pista. A pesar de la imagen y las palabras de emoción del locutor, otros aviones de compañías como Qatar Airways y British Airways aterrizaron en Beirut el martes y el miércoles pasado, ignorando el bloqueo. Wahbi Assim, alto cargo de las autoridades aeroportuarias libanesas, confirmó ayer que el aeropuerto recuperará la normalidad a partir de hoy, mientras que la oficina de Air France aseguró que reanudará sus operaciones en unas horas.