Medicina es la carrera con más solicitudes y Biotecnología tiene la nota de corte más alta
Medicina se ha convertido este año, por vez primera en los últimos cursos, en la carrera universitaria con más demanda entre los estudiantes que se matricularon de las últimas pruebas de selectividad. De todos ellos, 2.797 solicitaron como primera opción estudiar Medicina. A esta cifra hay que añadir el alumnado que accede a la universidad mediante otras vías de acceso: ciclos formativos, mayores de 25 años y los que cursan una segunda carrera.
En total, más de 42.000 alumnos se han prescrito en la universidad para empezar una carrera en el próximo curso, 400 más que en 2005. De todos ellos, el 87% podrá matricularse en la carrera que solicitó como primera opción.
Históricamente, Medicina ha sido uno de los estudios con más demanda, aunque no había tenido la primera posición. En el pasado curso, el liderazgo correspondió a Empresariales. Aunque entre ambos estudios, la relación entre oferta y demanda es radicalmente distinta. En Empresariales, la oferta de plazas supera la demanda: las universidades públicas ofertan más de 2.500 plazas, y el número de solicitudes asciende a 2.204.
Más de 2.800 alumnos desean estudiar Medicina, aunque sólo hay plazas para el 25% de ellos
La Generalitat alerta de la baja demanda en humanidades y ciencias experimentales
Ocho de cada diez alumnos preinscritos a la universidad cursarán la carrera deseada
En Medicina, ocurre todo lo contrario. Este curso las universidades han ofertado 823 plazas, 90 más en relación con el curso anterior. Pero han solicitado cursarla como primera opción 2.797 alumnos. Lo que es lo mismo: el 70% de ellos se queda fuera, y la nota de corte es muy alta. Estudiar Medicina en la Universidad de Barcelona es la cuarta carrera que requiere una media más alta, un 8,23. En otras facultades la nota es un poco más baja: un 7,87 en la Autónoma (UAB), un 7,83 en la Universidad Rovira i Virgili -la de las comarcas de Tarragona- un 7,73 en Lleida.
Modas televisivas
El secretario de Universidades e Investigación, Ramon Prats, atribuyó este boom hacia lo médico a la influencia de las teleseries "como Hospital Central". Prats explicó que desde hace años, son varias las universidades que desean contar con una titulación de medicina, entre ellas la Pompeu Fabra. Pero el número de plazas para realizar el MIR, el periodo de formación práctica en hospitales, cuya cifra de alumnos fija el Ministerio de Salud, hace años que se mantiene estable. Para evitar que el desajuste entre licenciados en medicina y plazas de MIR sea mayor que el actual, la Generalitat opta por incrementar muy levemente la oferta. Prats también aseguró que este aumento de solicitudes para cursar Medicina "ha sorprendido" al propio Departamento de Educación.
La influencia de las teleseries también se traslada en otros estudios. El fenómeno que hace unos años se produjo con la teleserie Periodistas se ha exportado a otras profesiones. Por ejemplo, el número de solicitudes para cursar Criminología -que es un título propio, y no una carrera- no para de aumentar, un fenómeno paralelo al éxito de la serie norteamericana de forenses CSI. Casi 300 estudiantes han solicitado estudiar criminología como primera opción.
La otra cara de la moneda son las humanidades y las carreras relacionadas con la ciencia, que son las que cuentan con un menor número de solicitudes. En la cola, se sitúa Ingeniería textil, que este año sólo han pedido cursarla cuatro estudiantes. Otra de las carreras que sigue bajo mínimos son filologías como la francesa (cinco estudiantes), la eslava (siete) y la alemana (11).
Aunque en ciencias experimentales la situación tampoco invita al optimismo. Como norma general, la oferta en los estudios de Física, Química y Matemáticas supera con creces la demanda. Una situación que, según Prats, pone de manifiesto la necesidad de hacer más pedagogía de la ciencia y la investigación entre los alumnos de secundaria y bachillerato, aunque es una carrera de ciencias experimentales la que cuenta con la mayor nota de corte. Para estudiar Biotecnología en la UAB la nota mínima que se requiere es de un 8,65. Un total de 24 carreras requieren de una nota de corte superior al siete.
En cambio, las carreras técnicas gozan, en general, de un buen estado de salud. Casi el 25% de los estudiantes han optado como primera opción a una carrera técnica. La palma se la llevan las ingenierías y la Arquitectura. Estudiar Ingeniería aeronáutica en la Universidad Politécnica requiere de la tercera nota de corte más alta, un 8,38.
Ciencias sociales
Casi la mitad de los estudiantes de bachillerato que cursaron la selectividad en junio pidieron acceder a carreras de ciencias sociales. En este ámbito destacan títulos consolidados y con una gran demanda como Administración y dirección de empresas (1.965 solicitudes) o Derecho (1.391).
Comunicación audiovisual en la Pompeu Fabra se ha consolidado como uno de los estudios que requiere una de las notas de corte más altas. Este año ocupa la segunda posición de la clasificación, ya que se necesita un 8,43 para matricularse. También sobresale la gran demanda en Magisterio especializado en educación infantil: 2.000 solicitudes. Aunque sólo hay plazas para el 25% de ellos.
Prats alertó del aumento del número de alumnos que deciden abandonar los estudios o cambiar de carrera durante sus primeros años universitarios. Esta situación ilustra, aseguró, "un fracaso de la orientación que se da al final del bachillerato". "Los estudiantes se matriculan en carreras que, cuando las descubren, se dan cuenta de que no es lo que les gusta" y el propósito de Educación, aseguró, es "reducir al máximo" estas situaciones.
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