Irán confía en que la crisis nuclear se pueda solucionar con el diálogo

El negociador nuclear iraní, Ali Lariyaní, confía en que la crisis causada por el programa atómico de Teherán se resuelva con diálogo, aunque rehúye dar un plazo para responder a los incentivos propuestos por las grandes potencias hace un mes, a cambio de que Irán suspenda el enriquecimiento de uranio.

"El asunto no es tan complicado como para que no se pueda solucionar con el diálogo", dijo ayer a la prensa en Madrid, donde se reunió con el presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, y el ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, que le pidió que responda en un plazo "corto". Según Lariyaní, que también se vio con Felipe González, necesitan "tiempo suficiente para estudiar la propuesta", por lo que el plazo de las potencias, que quieren que Irán conteste antes de la cumbre del G-8 del próximo día 15, "no influye a su trabajo".

Lariyaní calificó de "fructífera y constructiva" la cena informal que mantuvo en Bruselas el jueves con el representante de la política exterior de la UE, Javier Solana, y dijo que su visión de la oferta es positiva, pero con "dudas" que confía superar en las negociaciones. Éstas se iniciarán el martes en otra reunión con Solana, en la que fuentes europeas esperan que se empiecen a fijar las condiciones para que Irán suspenda el enriquecimiento como paso previo para seguir negociando, informa Ricardo Martínez de Rituerto. Un día después, se reunirán los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU (EE UU, Rusia, China, Francia y Reino Unido) y Alemania, que hicieron la oferta.