Vázquez: "He dado garantías al Papa sobre aborto y eutanasia"

El embajador ante la Santa Sede, Francisco Vázquez, dijo ayer que ha dado garantías al Papa de que el Gobierno español no tiene previsto ampliar la ley del aborto, ni proponer la eutanasia. Asimismo aseguró que su nombramiento ha desbloqueado el diálogo del Gobierno con la Iglesia española. Las relaciones "son óptimas", afirma en una entrevista que publica la revista italiana Famiglia Cristiana. Sin embargo, el portavoz de los obispos españoles, Juan Antonio Martínez Camino, reiteró ayer en Madrid que las relaciones con el Gobierno socialista son correctas sólo "formalmente", porque la Iglesia católica se enfrenta a "leyes gravemente injustas", en referencia a la educación, el matrimonio o la vida humana.

El que fuera alcalde de A Coruña, católico practicante y embajador desde el pasado 20 de mayo, cree que su nombramiento fue una "clara expresión de la voluntad de diálogo del Gobierno de Madrid" con la Iglesia de Roma. "Yo puse una condición al presidente Zapatero: el embajador debe explicar al Papa las razones de España, pero debe explicar también a España las razones de la Santa Sede. Mi misión es como un puente que se recorre en dos direcciones".

El ex dirigente socialista aseguró que las relaciones entre la Santa Sede y España "desde el punto de vista diplomático son óptimas", y que las del Gobierno y la Iglesia española "están mejorando". En su opinión, se ha abierto un "diálogo" sobre la enseñanza de la religión y la financiación pública de la Iglesia y se ha vuelto a discutir dentro de la comisión entre Gobierno y Conferencia Episcopal. El acuerdo, a su juicio, podría firmarse el próximo septiembre.

Los matrimonios gays

Vázquez dijo que Zapatero ha designado a la vicepresidenta, María Teresa Fernández de la Vega, representante del Ejecutivo en esa mesa. También participará en el encuentro entre el Papa y el presidente, en la tarde del 8 de julio, durante la visita del pontífice a Valencia. Sobre el matrimonio entre personas del mismo sexo, Vázquez aclaró que la discusión estaba en la oportunidad de llamar "matrimonio" a esas uniones, en lugar de denominarlas "pacto civil".

"La ley fue aprobada en el Parlamento y yo no la he votado", subrayó. También dijo que, al igual que la ley sobre el llamado divorcio rápido, se trataba de "medidas previstas" en el programa electoral del PSOE. "No ha habido diálogo con la Iglesia antes de las aprobaciones de las leyes. Pero ahora las tensiones se están superando y hay voluntad de mediación", añadió.

Preguntado por las relaciones entre el régimen franquista y la Iglesia católica, Vázquez dijo: "Yo defiendo a la Iglesia. Los socialistas y los comunistas en la clandestinidad en los tiempos de Franco se reunían en las iglesias y durante la transición la Iglesia jugó un gran papel, yo diría que decisivo. La cercanía de la Iglesia con el franquismo en los años cuarenta y cincuenta forma parte de la historia. Hoy, por ese motivo, no se pueden proponer políticas anticlericales".