Rajoy pide a Zapatero que destituya al fiscal general del Estado

El líder del PP, Mariano Rajoy, pidió ayer al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que destituya al fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, por sus críticas a la policía cuando cinco atracadores de bancos fueron puestos en libertad al no pedir la fiscalía la prisión provisional, al considerar que las pruebas contra ellos no eran consistentes. Zapatero aseguró que no pensaba destituir a nadie y que se trató de un hecho aislado de descoordinación.

Cinco atracadores con numerosos antecedentes fueron detenidos en Madrid el pasado día 7 en el conducto el aire acondicionado de una sucursal bancaria cuando se disponía a atracarla. La fiscal de guardia no pidió prisión, por lo que el juez se vio obligado a ponerlos en libertad tres días más tarde.

Ayer, Rajoy llevó este asunto al Pleno del Congreso con una pregunta a Zapatero en la que narró los hechos y aseguró que se trataba de un "grupo organizado y violento" y que "la opinión pública quedó estupefacta". Rajoy añadió que el fiscal general del Estado tuvo que rectificar, pero "hizo gravísimas acusaciones a la policía". El líder del PP preguntó a Zapatero a quién iba a destituir.

El presidente replicó que no tiene "pensado cesar a nadie", que "históricamente se han producido discrepancias muy concretas" entre la fiscalía y la policía, pero que "son absolutamente excepcionales". Rajoy insistió en que "un fiscal no puede insultar ni atacar a la policía". Zapatero recordó que en 2004 se produjo un caso de descoordinación con la puesta en libertad de 15 presuntos delincuentes rumanos, sin que el PSOE pidiera dimisiones. El presidente defendió a la policía, pero también expresó su apoyo al fiscal general "por su magnífica trayectoria".