Medio Ambiente inicia este mes las pruebas para descontaminar el embalse de Flix

Las más de 700.000 toneladas de residuos tóxicos y radiactivos depositadas a lo largo del tiempo por la empresa Ercros en el pantano de Flix (Ribera d'Ebre) tienen los días contados. Este mes el Ministerio de Medio Ambiente extraerá 350 toneladas en una prueba piloto que debe servir para acumular experiencia con vistas a la completa descontaminación de las 700.000 toneladas, que comenzará en febrero de 2007. Así lo aseguró ayer el portavoz de la comisión de seguimiento del proceso, Antonio Serrano, quien reiteró que en 2010 se acabarán los trabajos.

Una planta portátil sacará en los próximos días muestras de los lodos contaminados para someterlos a procesos químicos y térmicos. En paralelo, se analizarán las consecuencias para el río de la extracción de este material a fin de comprobar si el efecto de remover los lodos puede comportar que el Ebro los arrastre aguas abajo. Serrano, secretario para el Territorio y la Biodiversidad del Ministerio de Medio Ambiente, señaló ayer que no existe "ningún riesgo" de que los trabajos arrastren la contaminación. La comisión encargada de la descontaminación ha elaborado un plan que prevé la extracción de aguas subterráneas para abastecer el Camp de Tarragona en caso de accidente, ya que esta zona se nutre de agua del Ebro a través del minitrasvase, aunque la toma se halla a más de 50 kilómetros río abajo de Flix.

El alcalde de esta población, Pere Muñoz (ERC), se mostró satisfecho por "el cumplimiento" de los plazos. Serrano añadió que el final de las obras supondrá el fin de la "pesadilla" que viven las zonas ribereñas desde que un estudio del Centro Superior de Investigaciones Científicas y la Universidad Autónoma de Barcelona sacó a la luz la contaminación.