El padre de Jesulín, relacionado con las bajas fraudulentas

Las relaciones entre la Operación Halcón, abierta por un presunto fraude con facturas falsas en Cádiz, y la trama de bajas fraudulentas detectada en la denominada Operación Karlos han terminado por salpicar a Humberto Janeiro, padre del torero Jesulín de Ubrique. El sumario de la Operación Halcón recoge que Janeiro solicitó su invalidez a la organización que se dedicaba a la certificación de bajas falsas.

La conexión principal de ambas tramas es Carlos Carretero, ex jefe de la Policía Local de Ubrique (Cádiz), supuesto cabecilla de las operaciones fraudulentas.

En el sumario del fraude fiscal se especifica que, en el momento de la investigación, "se está pendiente de la aprobación de la invalidez de Humberto Janeiro". La baja de la suegra de Jesulín de Ubrique, Remedios Torres, según el sumario, "ya había sido conseguida".

Remedios Torres, residente en Castellón, para poder obtener en Cádiz la supuesta pensión ilegal por incapacidad laboral, fue dada de alta en una de las empresas ficticias creada por Carretero en Jerez.

Las conversaciones telefónicas transcritas en el sumario recogen también cómo los dirigentes de la red concretaban el pago de los 24.000 euros que debía abonar Remedios Torres a la organización para hacerse con la pensión deseada. En otras charlas, Carretero explicaba a la esposa de Jesulín de Ubrique, María José Campanario, los papeles que tenía que cumplimentar para tramitar la baja fraudulenta. La trama contaba con Francisco Casto, inspector médico de la Unidad de Valoración de Incapacidades de Cádiz, en prisión desde abril.

El sumario judicial sobre el fraude fiscal, de 1.200 folios divididos en cuatro tomos, también señala que Janeiro cobraba las exclusivas de una revista del corazón a través de una empresa ficticia intervenida durante la investigación de las facturas falsas.

El sumario añade que Miguel Parra, director de una sucursal del BBVA de Málaga, es quien "negocia con Carretero los pagarés que derivan de las operaciones ficticias" y "canaliza los beneficios que se obtienen". "Parra sabe que los pagarés llevan la firma falsificada, pero hace la vista gorda", añade el sumario. También tramitaba operaciones para la red fuera del horario legal.

Por último, en el denso documento judicial se recoge que José Luis López, un conocido empresario de Ubrique conocido como El Turronero, cometió también fraude fiscal y que la Agencia Tributaria presume "que continúa haciéndolo".