Los partidos rechazan que los terroristas marquen el debate

El Gobierno vasco pidió de nuevo ayer a ETA que "abandone para siempre el camino" de la violencia. Todas las fuerzas políticas hicieron declaraciones en la misma dirección respecto a la entrevista en el diario Gara. El portavoz del PNV, Iñigo Urkullu, aseguró en Barakaldo (Vizcaya) que ETA no puede "marcar el debate". El dirigente nacionalista señaló que da por bienvenida la entrevista si es "un código" para que la izquierda abertzale cambie de estrategia o si es un sistema para mandar algún tipo de mensaje al Gobierno central.

El secretario de organización del PSE-EE, Rodolfo Ares, indicó que ETA no va a conseguir "condicionar" el debate político y advirtió de que el "Estado de derecho seguirá combatiendo las actividades ilegales". Ares aseguró que lo único que interesa de ETA es los pasos que va a dar para "dejar definitivamente la actividad terrorista".

El portavoz popular en el Parlamento vasco, Leopoldo Barreda, fue más duro y señaló que la respuesta del Gobierno a la entrevista de ETA debe ser la desarticulación de la banda.

El coordinador general de Ezker Batua, Javier Madrazo, pidió también que desaparezca la banda y lamentó que ETA sea incapaz de hacer "autocrítica". Tanto EA como Aralar recordaron a la banda que no pueden tomar decisiones en nombre de la sociedad vasca.

El líder del PP andaluz, Javier Arenas, pidió al Gobierno que "diga la verdad" sobre el terrorismo y criticó al ministro del Interior por decir que se ve la luz en el fin del proceso de paz cuando ETA, dijo, vuelve a exigir "negociación política, un marco jurídico nuevo, sigue amenazando y justifica la extorsión", informa Efe. Arenas recordó que ETA ha reiterado "que no se va a disolver", además de exigir una "negociación política, la anexión de Navarra y mantener las amenazas".