Medio centenar de colegios superan ya el 20% de inmigrantes entre su alumnado

Un total de 51 colegios vascos de las tres provincias, fundamentalmente pertenecientes a la red pública, cuentan ya entre su alumnado con más de un 20% de escolares extranjeros. Esta circunstancia pone de relieve el riesgo de guetización de algunas escuelas, lo que complica aún más la integración de los inmigrantes en la sociedad. Los expertos consideran que el problema puede agravarse en el futuro si la llegada de más inmigrantes no trae aparejada una política de acogida que facilite su aclimatación y, sobre todo, si no se produce un reparto más equilibrado entre los colegios de ambas redes.

Estos 51 colegios, de los que sólo seis pertenecen a la red privada concertada, están situados primordialmente en el área del Gran Bilbao -sobre todo en municipios de la Margen Izquierda de la ría del Nervión-, Durango, Gernika, San Sebastián, Éibar, Irún, Ordizia y Vitoria. En conjunto, siete de cada diez alumnos extranjeros estudian en escuelas públicas y mayoritariamente en el modelo A (enseñanza en castellano con el euskera como asignatura).

Un reciente estudio elaborado por el Departamento de Educación concluye que las aulas del País Vasco acogen en la actualidad a cerca de 13.700 estudiantes inmigrantes en colegios, institutos y centros de formación de adultos. Aunque el porcentaje sobre el total de alumnos puede parecer pequeño, un 4,27%, en comparación con el que registran otras comunidades autónomas (Madrid, Andalucía, Murcia y Valencia, fundamentalmente), la llegada de inmigrantes al sistema escolar vasco es imparable.

Entre mayo de 2003 e igual mes de 2005, la cifra de estudiantes extranjeros integrados en las escuelas de Euskadi creció un 120%. Esta incorporación, sin embargo, no ha alterado el mapa del reparto de los alumnos inmigrantes por redes. El sistema público sigue soportando la mayor carga, especialmente en Álava, donde el desequilibrio supone que un 80% de estos alumnos están escolarizados en la red pública, quedando el 20% restante en la privada. En esta provincia incluso se da el caso de que un colegio, el Ramón Bajo, ubicado en el casco medieval de Vitoria, sólo cuenta con alumnos de procedencia extranjera.

El fenómeno de la concentración no es nuevo. El Ararteko ya lo advirtió en el año 2001 en un informe en el que señalaba que la gran mayoría de los niños con necesidades especiales -entre ellos, los de minorías étnicas- acuden a escuelas públicas y están matriculados en modelo A. En esta línea, el Consejo Escolar de Euskadi también alertó de la agrupación de alumnos desfavorecidos en la red pública.

Consciente de esta situación, Educación ha proclamado la necesidad de impulsar una política solidaria que facilite la integración y contribuya a una distribución equilibrada del alumnado extranjero entre ambas redes y entre los centros. La anterior titular de la consejería, Anjeles Iztueta, expresó durante su mandato la conveniencia de no aplicar una política de sanciones contra aquellas escuelas que pusiesen trabas a la matriculación de niños extranjeros, optando por buscar otro tipo de vías de solución.

La consejería planteó en su momento un horizonte para el año 2010 en el que el 60% del alumnado inmigrante cursase estudios en la red pública y el 40% restante, en la privada concertada. Sin embargo, estos propósitos chocan por ahora con la tendencia general.

Otro factor que influye a la hora de la concentración de los escolares extranjeros en una serie de centros es el progresivo descenso de los colegios que imparten modelo A, hasta el punto de que en la actualidad no superan el 15% en conjunto.

'Efecto llamada' escolar

Si se tiene en cuenta que, del total de inmigrantes, cerca de un 70% se escolariza en la red pública y más del 50% en el modelo en castellano, se dibuja con claridad el perfil del tipo de centro donde se producen las concentraciones.

Jesús Manuel Septién, profesor en el Instituto Federico Baraibar de Vitoria, acaba de publicar el libro Una escuela sin fronteras. La enseñanza del alumnado inmigrante en Álava. El texto realiza un pormenorizado análisis de cuál es la situación en dicha provincia. Septién considera importante resaltar el hecho de que la concentración del alumnado se produce en unos centros determinados de alguna circunscripción concreta. "Esta acumulación se produciría [...] por una especie de efecto llamada escolar, parecido a la que ocurre entre las familias y en el mundo laboral, según el cual los alumnos de la misma procedencia tenderían a juntarse en los mismos centros", señala.

Junto a ello, se podría también hablar de un paralelo efecto huida por el abandono por el alumnado autóctono de los centros en que se matriculan inmigrantes.