Un hostelero denuncia a un alcalde por connivencia en el negocio de las bodas

El empresario de hostelería Gabriel Navarrete Ruiz, propietario de un salón de bodas en Albanchez de Mágina (Jaén), ha presentado una querella por tráfico de influencias y abuso en el ejercicio de sus funciones contra el alcalde del municipio, el socialista Eufrasio Ortiz Muñoz, y contra el portavoz municipal del PP, Alejandro Morales Moreno. El hotelero, que reclama una indemnización de 600.000 euros, denuncia la "persecución" de la que es objeto por parte del Ayuntamiento, así como la supuesta connivencia de los dos ediles al celebrar bodas en locales "sin las licencias municipales de apertura", lo que niega el alcalde.

El empresario Gabriel Navarrete, que extiende la querella por prevaricación contra el alcalde y el secretario del Ayuntamiento, lleva desde el año 1996 litigando para que cese lo que él entiende como "persecución, intrusismo y competencia desleal". Ese mismo año el Ayuntamiento empezó a ceder gratuitamente el centro social para la celebración de bodas, bautizos, comuniones y otras reuniones que, según se expone en la querella, eran celebradas por Carmen Viedma Expósito, esposa del concejal del Partido Popular Alejandro Morales Moreno. Según el querellante, las celebraciones en el salón social de este municipio, de unos 1.500 habitantes, "carecían de las licencias para el desarrollo de la actividad de hostelería, llegando a realizarlas por su condición de esposa del concejal (...) y respaldado por los otros dos querellados (alcalde y secretario), los cuales, a sabiendas de que no se podían realizar, concedían las autorizaciones ilegales para dichos eventos".

Ordenanza municipal

Una resolución de la Sala de lo Contencioso del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) de 2003 obligó al Ayuntamiento a suspender la cesión del edificio municipal por no existir contrato de arrendamiento ni el correspondiente concurso público. Sin embargo, el alcalde, Eufrasio Ortiz Muñoz, aprobó en 2004 una ordenanza municipal en la que se establecía la cesión del centro social cobrando un precio público a los solicitantes. Esa ordenanza también fue impugnada por el hostelero Gabriel Navarrete, y el Juzgado de lo Contencioso número 2 de Jaén ordenó la suspensión de la actividad. Pero es que, además, el Ayuntamiento ha autorizado en los últimos meses la celebración de bodas en un antiguo taller de confección -también gestionado por la esposa del concejal del PP- que "carece de cualquier requisito sanitario, de seguridad e higiene, administrativo o de aforo", según expone el escrito de querella.

En el local de Confecciones Alba se han celebrado varias bodas a pesar de las advertencias en sentido contrario de la Delegación de Salud y del Servicio de Juego y Espectáculos Públicos de la Junta en Jaén, que levantó acta constatando que no tenía licencia de apertura, documento de aforo, autorización de manipulación de alimentos y carecía de servicio de vigilancia. El alcalde se ha escudado en el "interés general" para justificar su postura. "Mientras encuentre un resquicio legal seguiré luchando para que las bodas se hagan en el centro social y no se tengan que hacer fuera del pueblo", señaló.