Zapatero plantea a Rajoy un diálogo "directo y exclusivo" para buscar el fin de ETA

Tras casi dos años de desencuentros entre el Gobierno y el PP sobre la política antiterrorista, el presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, y el líder de la oposición, Mariano Rajoy, dieron ayer lo que ambos calificaron de "un primer paso" en la recuperación del consenso en la lucha contra ETA. Rajoy garantizó a Zapatero su apoyo y el de su partido para "acabar con ETA". El líder del PP pidió la convocatoria del Pacto Antiterrorista, a la que Zapatero no se negó. Pero el presidente puso el acento en establecer una comunicación "directa y exclusiva" con Rajoy, sólo con él, para buscar el fin de ETA. Rajoy le pidió que "constate" que la decisión de la banda es "irreversible", y el presidente contestó que "el Gobierno ya trabaja en esa constatación".

Rajoy: "Le he ofrecido mi apoyo y el de mi partido para acabar con ETA. Este apoyo no tiene apellidos ideológicos ni partidistas"

Rajoy: "Le he preguntado si él o su Gobierno tienen algún compromiso con la organización terrorista ETA y me ha dicho que no"

Zapatero: "El diálogo fundamental se debe producir directa y exclusivamente entre el presidente del Gobierno y el líder de la oposición"

Zapatero: "Lo más importante del encuentro es un clima de recuperación de la confianza, que llevará tiempo y ha de ser cultivado por ambos"

Las dos horas y media que duró la entrevista entre Zapatero y Rajoy dieron un resultado muy diferente del anterior encuentro entre ambos, el pasado 5 de septiembre. Hace seis meses, constataron su total enfrentamiento por las políticas antiterrorista y territorial. Rajoy llegó a decir que no sabía para qué había sido convocado a esa entrevista. Ayer, en cambio, aseguraron que su reunión había sido útil. Ambos cruzaron información y analizaron la declaración de alto el fuego permanente de ETA.

Zapatero aseguró que él intenta buscar "el común denominador" entre el Gobierno y Rajoy. Los dos, con distintas palabras, contaron cuál es ese común denominador: constatar que ETA ha decidido dejar las armas de forma definitiva e "irreversible".

"Lo único importante, la única prioridad, a lo que hay que aplicarse en estos momentos, es a que el Gobierno constate que existe una decisión irreversible de ETA de poner fin a su actividad criminal", aseguró Rajoy. Minutos después, Zapatero remachó: "El Gobierno trabaja ya en constatar que estamos ante un alto el fuego permanente que signifique el alto el fuego definitivo y total de la violencia".

En cuanto a los procedimientos, Rajoy pidió la convocatoria de la comisión de seguimiento del Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo, que no se reúne desde que, hace un año, el PP y el PSOE, sus únicos firmantes, chocaron frontalmente porque el Gobierno no instó a la ilegalización del Partido Comunista de las Tierras Vascas.

Pacto Antiterrorista

Zapatero asumió la convocatoria de la reunión de dicho pacto, pero dejó claro que le parece prioritaria la "interlocución directa" con Rajoy, dada la discreción que requiere el proceso. "Atendiendo a la naturaleza de la situación, el diálogo fundamental se debe producir directa y exclusivamente entre el presidente del Gobierno y el líder de la oposición", zanjó Zapatero. Argumentó que eso, según él, es lo que "demandan los ciudadanos", por la "responsabilidad" que tienen ambos.

Zapatero calificó de "positivo" el encuentro y destacó que había servido, sobre todo, para "recuperar el clima de mutua confianza" perdida tras los enfrentamientos entre el PSOE y el PP. "Lo más importante del encuentro es un clima de recuperación de confianza, que llevará tiempo y ha de ser cultivado por ambas partes", dijo.

El presidente trató de propiciar ese buen clima desde el primer momento, al recibir a Rajoy al pie del automóvil que le llevó a La Moncloa y, sobre todo, al comparecer, de forma excepcional y sin aviso previo, en la conferencia de prensa posterior al encuentro. Lo hizo en lugar de la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, que estaba anunciado que sería la portavoz de Zapatero sobre la entrevista.

Rajoy prestó su colaboración a ese buen clima al destacar que había ido a La Moncloa a ofrecer al presidente su apoyo y el de su partido "para acabar con ETA". Un respaldo, dijo, "que no tiene apellidos ideológicos ni partidistas", porque el final definitivo de ETA es "una exigencia de la democracia constitucional".

El presidente resaltó la importancia de que Gobierno y PP avancen juntos: "Si el proceso se produce en un buen clima será mucho más eficaz y rápido".

Rajoy destacó la importancia de que, en ese proceso, "nadie se llame a engaño". Para ello, según el líder popular, deben quedar claras cuatro cosas:

- "Que el Gobierno no tomará ninguna medida que pueda interpretarse, directa o indirectamente, como una contrapartida política a la banda terrorista ETA".

- "Que no habrá concesiones a ETA ni directa ni indirectamente".

- "Que ninguna mesa podrá proponer o plantear ningún cambio en la legalidad vigente, ni en el País Vasco, ni en Navarra, ni en el conjunto de España".

- "Y que no habrá ningún contacto con organizaciones terroristas, u organizaciones ilegales, para tratar estos temas".

Zapatero contestó implícitamente a estas líneas rojas de Rajoy al reiterar que estamos ante "un proceso largo, difícil y duro". Y que "el Estado de derecho tiene sus normas y éstas se resumen en el cumplimiento de la legalidad". El presidente subrayó que "la democracia busca integrar" y que, cumpliendo con sus normas, en ella "caben todas las ideas y todas las propuestas".

El presidente contó que Rajoy le había instado a tomarse el tiempo necesario antes de ir al Congreso a pedir el apoyo parlamentario. El líder popular ratificó que había "pedido al presidente que no se precipite y que no dé pasos que comprometan al Estado".

Zapatero ya ha anunciado que tiene intención de acudir al Parlamento antes del verano para pedir su respaldo para abordar ese fin dialogado de ETA. El jefe del Ejecutivo fue preguntado por este asunto. Replicó: "Rajoy me ha transmitido que me tome el tiempo que sea necesario. Que le informe. Después anunciaremos, si se producen las condiciones, lo que será una explicación ante la ciudadanía del proceso de diálogo, de negociación, para el fin de la violencia".

Rajoy insistió, sobre todo, en las "condiciones" para constatar que el cese el fuego es definitivo. En un breve turno de preguntas, el líder popular fue interrogado sobre si el presidente le ha contado cómo ha llegado a la conclusión de que, efectivamente, ETA está a punto de dejarlo. Rajoy replicó: "Le he preguntado si él o su Gobierno tiene algún compromiso con ETA, y me ha dicho que no".

El líder popular insistió en esa falta de compromiso del Ejecutivo con ETA en su respuesta a otra pregunta. "Lo más relevante es que el presidente me ha dicho que él no se ha comprometido a nada y eso es una información, para mí, muy relevante". Eso sí, Rajoy subrayó que ni a él ni al PP "se le pueden pedir actos de fe, ni que asuman lo que hace el Gobierno, haga lo que haga". Eso no lo hará. Pero sí apoyará al Gobierno en una política pactada.

Zapatero también se mostró dispuesto al pacto, pero advirtió de que recuperar la confianza entre el Gobierno y el primer partido de la oposición llevará tiempo. "Hoy hemos dado un primer paso, pero queda mucha tarea por delante". En esa tarea, Zapatero dejó muy claro que busca una relación de confianza personal en Rajoy. De ahí que le haya planteado una "interlocución directa y exclusiva" y no reabrir la relación entre los dos partidos en el Pacto Antiterrorista.