Gas Natural defiende su proyecto y promete guerra

"La batalla no ha terminado. Tenemos bazas por jugar y lucharemos". Con el ojo puesto en el Gobierno español, fuentes de Gas Natural encajaron con estas palabras y una descomunal "sorpresa" la impactante réplica alemana a su oferta pública de adquisición (OPA) sobre Endesa. La gasista también admitió que un tercer golpe ganador, el suyo, "está complicado", vista la robusta capacidad financiera de E.ON.

La cúpula de Gas Natural se reunió ayer para barajar sus opciones. Pese a que sopesó dar un paso al frente y anunciar una mejora de su oferta, finalmente optó por hacer como si los mercados no estuvieran ardiendo y como si el sector energético no volviera a ser pasto de las quinielas: la gasista afirmó -vía comunicado- que su oferta sigue "su curso ordinario", prometió que cualquier decisión que tome "tendrá en cuenta los intereses de sus accionistas", defendió su plan para crear la mayor compañía "española" del sector y, como nota amarga, incidió sobre el "sentido empresarial y estratégico de integrar gas y electricidad".

Y es que el nuevo quebradero de cabeza que se le ha echado encima a Gas Natural procede de donde duele: E.ON, fruto de una fusión impuesta en su día por el Gobierno alemán contra los reguladores del país y basada en una suma de industrias gasista y eléctrica. E.ON siempre ha sido el referente enarbolado por el grupo catalán, para intentar comprar Iberdrola en el pasado o, ahora, Endesa.

"Los mismos que nos acusan de atentar contra la competencia saludan ahora una operación lanzada por los mismos que han hecho lo que nosotros queremos hacer", se lamentaban ayer en el grupo que preside Salvador Gabarró.

Gas Natural tiene varias opciones. La primera: tirar la toalla y continuar en solitario, siempre atenta a no ser engullida por otro peso pesado. La segunda: mejorar el precio de su oferta por Endesa hasta el límite de su capacidad financiera. A este respecto, la gasista no puede endeudarse, por imperativo de la Comisión Nacional de la Energía (CNE), más de 5,25 veces su resultado bruto operativo, para asegurar que financiar la compra no le impida invertir para garantizar el suministro. Este límite implicaría que la gasista no podría mejorar la oferta por encima de 30 euros por título, o superar los 25,4 en efectivo y el resto en acciones.

La tercera opción de Gas natural es buscar un aliado que le permita un embiste de mayor envergadura. Ayer, los analistas hacían pronósticos para todos los gustos. Muchos de ellos apostaban por un nuevo acercamiento a Iberdrola, que bajo el anterior Gobierno del PP fracasó. Ambas empresas rechazaron entrar en "fabulaciones" y, en todo caso, apuntaban que sólo sería posible un acercamiento amistoso. Otros analistas elucubraban sobre alianzas transfronterizas con la eléctrica Enel o la petrolera Eni y sobre el interés intacto de la alemana RWE por Endesa.

'Acción de oro'

Sin embargo, todas las opciones dependen de cómo actúe el Gobierno, que promete hacer "todo lo que esté en su mano" para que el sector energético descanse sobre manos "nacionales" y que aún tiene derecho de veto en Endesa a través de la llamada acción de oro, cuestionada por Bruselas.

Fuentes jurídicas próximas a la operación apuntaron que recurrir a esta fórmula sería "contravenir el Derecho comunitario". Por el contrario, otras fuentes cercanas a la cúpula de Gas Natural aseguraron que "prescindir de la golden share en este caso sería abrir la veda para que otras grandes empresas españolas duraran lo que dura un caramelo en la puerta de un colegio", en sectores como el petrolero o el financiero, y recodaron cómo ejemplo el patriotismo económico del vecino Gobierno francés.

La oferta de la gasista (21,3 euros por acción, pagada en un 65% con sus propias acciones) será debatida por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) el jueves. Si la aprueba, la gasista tendrá cinco días para lanzar su oferta. E.ON tendrá otros 10 para lanzar la suya. Si la CNMV también la aprueba, será la hora de las mejoras del precio. Sin ellas, "Gas Natural pierde el tren", señalaban ayer analistas como Jesús Muela (GVC). "Si Gas ofrece 30, E.ON ofrece 32. Se pelea con el más grande y el menos cansado", coincidía Alberto Alonso (Eurosafei).