Bajan el incivismo y la prostitución con la nueva norma, según el Ayuntamiento
Joan Clos afirma que el gobierno municipal no persigue a los indigentes
El Ayuntamiento de Barcelona afirma que en los primeros días de entrada en vigor de la ordenanza cívica se ha producido un descenso de la prostitución, de la actuación de vendedores ambulantes y de los comportamientos incívicos. El alcalde, Joan Clos, dijo ayer que se está actuando para reducir la venta ambulante y atajar los comportamientos incívicos de quienes hacen sus necesidades en la vía pública y recalcó que el municipio no persigue la mendicidad.
El concejal de Vía Pública, Jordi Hereu, señaló, ayer que se está actuando para atajar todo tipo de comportamiento incívico y destacó que los efectos son palpables en un descenso de la prostitución en la Ronda de Sant Antoni y en la calle de Sant Ramon. El presidente del eje comercial de Sant Antoni, Vicens Gasca, corroboró que la prostitución ha bajado en la zona. "Ha habido un descenso gradual y es una buena noticia para los comerciantes porque la gente va más tranquila por la calle y los clientes se sienten más cómodos", dijo el comerciante.
Prevenir frente a los colegios
Clos dijo que el Ayuntamiento actúa contra la prostitución "con mucho "seny i cura", sobre todo cuando se practica en zonas próximas a las escuelas. El alcalde añadió que también se presta especial atención en los casos de personas que, "o bien son menores, o están también sufriendo algún tipo de explotación por grupos organizados".
Los concejales Assumpta Escarp y Jordi Hereu destacaron por separado que la norma no va contra la prostitución, sino que se centra en todos los actos incívicos y recalcaron que la actuación contra la prostitución se focaliza cuando se practica a menos de 200 metros de los colegios y cuando comporta un perjuicio para otras actividades como el comercio.
Clos afirmó que en otros aspectos previstos en la ordenanza como atajar la venta ambulante, los actos incívicos de los patinadores o sancionar a quienes hacen sus necesidades en la vía publica se está actuando sin problemas. Dentro de unos días se hará balance de la aplicación de la ordenanza, dijo el alcalde.
El alcalde también quiso dejar claro que la mendicidad social no se persigue y destacó que han aumentado las medidas de protección y el programa de ayudas de bienestar social. "Si se ha cometido algún error se está corrigiendo. Pero es falso que persigamos la mendicidad social". Escarp afirmó que los servicios sociales explican a los indigentes que existen centros de acogida para ellos y que sólo se actúa contra quienes tienen actitudes coactivas como los limpiacristales que piden dinero a los conductores o quienes se sirven de menores para ejercer la mendicidad.La concejal Assumpta Escarp afirmó que lo que hace la Guardia Urbana con los indigentes es colaborar con los servicios sociales para que dejen la calle. La gerente de Servicios Personales del Ayuntamiento, Glòria Figuerola, señaló que a los mendigos se les informa de que pueden dormir en lugares más cómodos que la calle. "Hay plazas para ellos en los centros de la Mar Bella, de la calle de Almogàvers y de la Meridiana, y plazas concertadas con algunas ONG", dijo Figuerola.
El Ayuntamiento afirma que aproximadamente la mitad de los mendigos rechazan acudir a los centros de acogida. "Estamos retirando una persona al día de la calle. Tenemos más efectivos para frenar la mendicidad y estamos logrando llegar a los que llevan menos tiempo en la calle y no sólo a los cronificados, que siempre resultan más dificiles de reinsertar", dijo la responsable municipal.
"No hay milagros"
Por su parte, el concejal de Movilidad, Jordi Hereu, señaló: "No hay milagros a corto plazo. Se necestia tiempo. Cada día un mendigo deja voluntariamente la calle".
Respecto al conjunto de la norma contra el incivismo, Hereu destacó: "Nos da más instrumentos para actuar. Hay unas reglas más claras. Estamos actuando gradualmente. Primero a través de la información a los afectados a través de personal de servicios sociales y después con la Guardia Urbana. Ahora estamos actuando ya a través de las sanciones, pero no perseguimos la sanción por la sanción. Lo que buscamos es también concienciar para conseguir un descenso gradual de los actos incívicos".
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