Intercambio de favores
El veterinario Quintana mantuvo hasta 2004 una ganadería ilegal en Zúñiga (Navarra) gracias al apoyo del anterior alcalde
Tener mucho ganado puede ser una complicación si te fallan apoyos. José Fernando Quintana, veterinario y ex gerente de Abeltzain, la cooperativa que gestiona de forma delegada la identificación y sanidad animal en Álava, los tenía, y muy buenos, en Zúñiga, el municipio navarro vecino a su pueblo, Santa Cruz de Campezo (Álava). Hasta las elecciones municiples de 2003, el entonces alcalde de Zúñiga, Luis Abel Remiro, y los concejales Armando Díez Osés y Javier Arróniz le dieron cobijo ganadero en el municipio y beneficios que posteriormente se han demostrado contrarios a derecho en sentencias judiciales.
El actual alcalde, José Manuel González, que estando en la oposición denunció junto a otro concejal la concesión graciosa a Quintana en marzo de 2003 de pastos comunales para una explotación extensiva, y los concejales Jesus Antonio Díaz y Pedro Miguel Cubillas tildaron la semana pasada de "ilegal y carente de escrúpulos" las actuaciones del anterior gobierno de Zúñiga. Las dos sentencias del Tribunal Administrativo de Navarra llegaron al Ayuntamiento en septiembre de 2004, cuando ya los anteriores gestores municipales habían pasado a la oposición tras perder la elecciones. Tras recibir el fallo que les daba la razón, González y su equipo ordenaron a Quintana sacar el ganado y prefirieron olvidar el tema para no generar mayor crispación en el pueblo. Sin embargo, la tensión entre gobierno y oposición ha ido en aumento. La última decisión ha sido cambiar de secretario municipal, al considerar que el anterior había sido un "cooperador necesario" en las irregularidades de la anterior corporación.
Aunque José Fernando Quintana, destituido de su puesto en Abeltzain tras las irregularidades detectadas en sanidad e identificación animal de las explotaciones de su familia, no se le concedió licencia hasta 2003 para mantener una explotación ganadera extensiva, existen en el Ayuntamiento de Zúñiga copias de documentación emitida para su padre, Eduardo Quintana, y para una de sus explotaciones, Mendi Yoar. En concreto, certificados de aprovechamientos de hierbas y de gasto de agua desde 1999.
Quintana cuenta con una explotación en teoría activa y con la máxima calificación sanitaria en Zúñiga, según los datos del Simogan (Sistema de Movimientos de Ganado). El alcalde asegura, sin embargo, que de momento allí no tiene ganado. La ganadería de Quintana en Zúñiga se la compró a la familia del concejal Díez Osés, a quien, según las sentencias, también beneficiaron las decisiones del anterior gobierno local.
Una sentencia determina la primera irregularidad municipal: conceder pastos comunales
a Quintana, residente en otra localidad, y negárselos a un vecino del pueblo que los solicitó para unas yeguas. La segunda declara contraria a derecho la compra de un conducción de agua, que años antes fue declarada ilegal en una sentencia judicial, a la familia Díez Osés por 987 euros. La conducción tenía por objeto abastecer a las vacas de Quintana. Ambas decisiones fueron anuladas en abril de 2004. Quintana se llevó las reses y la familia del concejal tuvo que devolver el dinero. "Tenemos claro que dichos acuerdos se tomaron para favorecer irregularmente a Quintana y a los Díez Osés", señala el actual equipo de gobierno.
Recuerda también que la anterior corporación perdonó 2.619 euros a Quintana. "Se dejaron el grifo abierto y le perdonaron la factura. Sólo le cobraron un prorrateo de lo que gastaba otros meses". Aunque se llevó el tema a los tribunales, no se ganó porque el entonces secretario, José Miguel Corres, "envió al juzgado la falsa información que le dictó el ex alcalde para poder escapar de la justicia". González y los concejales que le apoyan han decidido sacar a la luz el tema ante la campaña de "calumnias" que ha iniciado la oposición a raíz del despido de Corres.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.