Espeleología mutante

Hace unos meses se estrenó la película The Descent, producción británica que mezclaba la acción, la aventura, el terror, el thriller y la ciencia-ficción en una historia ambientada en el mundo de la espeleología y protagonizada exclusivamente por mujeres.

El filme americano La caverna maldita se inscribe en semejantes parámetros respecto del género cinematográfico, aunque aquí sean los cuerpos danone de los hombres los que dominen sobre los de las féminas. Como ocurría en The Descent, La caverna maldita intenta demostrar que las criaturas extrañas que amenazan con destruir a la raza humana no tienen por qué tener una procedencia extraterrestre (como ocurre en La invasión de los ladrones de cuerpos, La cosa, Alien...). También pueden ser producto de mutaciones genéticas producidas en lugares recónditos adonde pocos seres humanos han logrado llegar y de donde ninguno ha conseguido salir.

Molde

Peor dirigida que The Descent y con unos entes mucho menos logrados artísticamente, La caverna maldita está realizada por Bruce Hunt, director de segunda unidad de la primera entrega de la saga de Matrix, y de tercera unidad de sus dos secuelas, algo que se nota en la impersonalidad de sus tomas, que parecen hechas con un molde y que de igual manera podrían valer para esta película como para muchas otras de semejante ambiente.