Alfredo di Stéfano supera con éxito una delicada operación de corazón

La implantación de cuatro bypasses solucionó ayer de momento el grave estado de salud de Alfredo di Stéfano, ex jugador y presidente de honor del Real Madrid, después de sufrir un infarto agudo de miocardio el pasado sábado. Los médicos del hospital La Fe, en Valencia, lo intervinieron durante siete horas. La operación comenzó cerca de las ocho de la mañana y terminó casi a las tres de la tarde. El parte médico informó de que Di Stéfano se encuentra estable pero con ventilación asistida, y que su evolución en las próximas 24 horas será clave para su definitiva recuperación.

El corazón de Alfredo Di Stéfano, de 79 años, afrontó el ejercicio más duro de toda su vida, una delicadísima operación que duró casi siete horas y mediante la que le fue implantado un cuádruple bypass en el hospital La Fe de Valencia. La dura jornada comenzó tempranísimo para Di Stéfano. El ex jugador superó la noche sin que se repitiera el proceso febril y las graves arritmias que hicieron temer por su vida en la madrugada del lunes, y los médicos, visto que mantenía las constantes vitales intactas, decidieron a primera hora de la mañana de ayer comenzar con los preparativos para la operación. El delicado estado del corazón de Di Stéfano aconsejaba una operación inmediata, pero no sin antes asegurarse de que contaba con las suficientes fuerzas para resistir una intervención tan larga. La situación era crítica, como admitieron los médicos. Una parte del corazón de Di Stéfano no recibía el riego sanguíneo necesario, por lo que existía el peligro de una necrosis (muerte de los tejidos) si no se solucionaba el problema. Es más, en el caso de que una arteria se obstruyera, el paciente hubiera fallecido inmediatamente.

La diligencia fue máxima. A las siete de la mañana se inició el proceso preoperatorio, entre la incertidumbre y el nerviosismo de sus hijos y nietos. Una hora después, Di Stéfano ingresaba en el quirófano. Familiares, periodistas y ex compañeros se arremolinaban en los pasillos y salas del hospital a la espera de una noticia tranquilizadora. No fue hasta casi las tres de la tarde cuando llegaron las primeras conclusiones positivas. Los médicos habían implantado un cuádruple puente coronario en el castigado corazón de Di Stéfano, tres con vena y uno con una arteria mamaria. El deterioro del órgano obligó a los doctores a extremar las precauciones y a elevar hasta cuatro las implantaciones de una arteria artificial.

Di Stéfano fue trasladado después de la intervención a la Unidad de Reanimación, con el fin de observar su reacción a los estímulos externos una vez recuperado de la anestesia. "Está estable y sin complicaciones destacables, se encuentra en situación hemodinámicamente estable, con asistencia ventilatoria y ligero soporte circulatorio", informó el parte médico emitido por el doctor Anastasio Montero, jefe del servicio coronario del hospital, y el doctor José Luis Vicente, jefe del servicio de reanimación del centro, poco después de las cuatro de la tarde. "La operación ha transcurrido con normalidad, teniendo su corazón un comportamiento dentro de los parámetros previstos", añadió el comunicado.

El doctor Montero aseguró que las 24 horas siguientes a la intervención son "importantes en su evolución porque es el periodo en el que pueden aparecer mayores complicaciones". El hospital facilitará hoy un nuevo parte médico. Manuel Cervera, secretario autonómico de Sanidad de la Generalitat Valenciana, aseguró que los médicos son "optimistas" respecto a la recuperación de Di Stéfano. "Se le han realizado cuatro bypass aortocoronarios, una cirugía importante en un paciente de 79 años. Ha reaccionado muy bien a la cirugía y a la recuperación de tono cardíaco. El equipo quirúrgico está muy contento con el resultado", explicó Cervera.

Di Stéfano se encontraba sedado después de la operación, y con una vigilancia constante de sus funciones vitales. "Cualquier cirugía cardiaca en cualquier paciente es importante, el corazón tiene que retomar el pulso y actividad, y hay que ver cómo reacciona el corazón con el nuevo tejido que le han puesto. Di Stéfano es además diabético, por lo que puede darse cualquier tipo de complicación circulatoria", advirtió sin embargo Cervera. El estado de tensión es máximo en torno al ex futbolista, tanto dentro como fuera del hospital. Las próximas horas son claves.