Asaja alerta del bloqueo de 25.000 expedientes del sistema oleícola
La organización agraria Asaja ha alertado del bloqueo que están sufriendo más de 25.000 expedientes de otros tantos oleicultores jiennenses a los que la Junta de Andalucía les ha instado a presentar en un plazo de 10 días alegaciones para incluir sus parcelas en el SIGPAC (Sistema de Información Geográfica de Identificación de Parcelas Agrícolas de Andalucía) que, a partir de finales de año, sustituirá al antiguo SIG.
Se trata de un órgano dependiente del Fondo Español de Garantía Agraria y de las consejerías competentes de las comunidades autónomas que actúa como un registro público y que informa gráfica y alfanuméricamente sobre las parcelas susceptibles de beneficiarse de las ayudas comunitarias relacionadas con la superficie.
Asaja ha denunciado las largas colas que encuentran los agricultores cuando acuden a las oficinas comarcales agrarias para incluir sus parcelas en el SIGPAG. Según la organización agraria, la Junta no cuenta con el suficiente personal especializado para atender la demanda. "El resultado es un trato vejatorio e inhumano hacia el agricultor, que se siente indefenso ante la falta de competencia de la Administración autonómica", señala el gerente de Asaja en Jaén, Luis Carlos Valero.
El SIGPAC mide mediante ortofotografías y un complejo software informático la superficie agrícola que corresponde a cada agricultor. El problema, según Asaja, es que en la oficinas comarcales agrarias, donde se debe resolver el expediente, no hay suficiente personal cualificado para atender a los oleicultores. Asaja insiste en que la situación es "catastrófica" y que el único motivo es la falta de previsión de la Junta de Andalucía. De ahí que inste a los responsables de la Consejería de Agricultura y Pesca a tomar medidas ante la falta de personal en estas oficinas.
Además, Asaja asegura que el teléfono gratuito que asesora a los afectados (900-101515), así como la página web donde se debe solicitar la información (www.juntadeandalucia.es/agriculturaypesca) "se encuentran totalmente colapsados", lo que obliga a los oleicultores a desplazarse a las oficinas, donde, añade Asaja, "es prácticamente imposible que les atiendan sin haber concertado una cita previa, haciéndoles perder un día de trabajo".
