_
_
_
_
PREMIOS NACIONALES DE ARTES PLÁSTICAS Y DE TRADUCCIÓN
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Celebración de un creador coherente

Nacido en Barcelona en 1942, la trayectoria artística de Antoni Muntadas se ha desarrollado en los Estados Unidos de Norteamérica, al amparo de instituciones universitarias como el prestigioso Center of Advanced Visual Studies del Massachusetts Institute of Technology (MIT), donde, desde 1977, se formó como investigador y estuvo impartiendo posteriormente cursos como profesor.

Aunque su carrera artística se inició, tras cursar estudios de ingeniería industrial, a comienzos de 1960 fundando en 1964 el Grupo Machines, en 1971 Muntadas dejó su actividad como pintor y se aplicó a la experimentación con los nuevos medios. Era la época de emergencia del arte conceptual español, que tuvo una particular y efímera importancia en Barcelona. Muntadas fue uno de sus más brillantes representantes, pero la falta de arraigo de estas prácticas novedosas en esa España, entonces agitada por otras urgencias e inquietudes, condicionó su instalación en América. No por eso rompió Muntadas su relación con España y merece al respecto recordar su participación en la mítica galería Vandrés, de Madrid, donde expuso regularmente, así como cuando Fernando Vijande, que era su director, abrió un nuevo espacio propio en la misma capital.

De todas formas, su concepción, artística y experimental, exigente y muy refinada, aunque siempre dotada de un sentido social y político, tuvo un alcance público restringido, por lo menos hasta etapas recientes, sobre todo a partir de la década de 1990, cuando el mejor arte renovador se volvió sobre este tipo de presupuestos.

En la pasada Bienal de Venecia, Muntadas representó muy dignamente al Pabellón Español y su obra es contemplada en la actualidad merecidamente con creciente interés. Creo que este premio nacional, aunque tardío, es muy justo y oportuno, pues no sólo celebra la obra de un creador coherente en el periodo mejor de su madurez, sino que subraya toda una corriente que él impulsó y que no ha obtenido el reconocimiento local que se merece. La obra de Muntadas explota el sentido comunicológico del arte como crítica del entorno a través de la influencia distorsionante de los medios de difusión de masas, en un momento de exuberancia de la cultura posindustrial.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_