El tercer turista espacial parte con éxito en una nave rusa hacia la ISS

El tercer turista espacial de la historia, el estadounidense Greg Olsen, de 60 años, despegó ayer hacia la Estación Espacial Internacional (ISS) junto a dos astronautas profesionales, el estadounidense William McArthur y el ruso Valeri Tókarev a bordo de una Soyuz TMA-7. La nave despegó con éxito del cosmódromo de Baikonur, en Kazajistán, y deberá acoplarse a la ISS mañana.

El tercer turista espacial de la historia, el estadounidense Greg Olsen, de 60 años, despegó ayer hacia la Estación Espacial Internacional (ISS) junto a dos astronautas profesionales, el estadounidense William McArthur y el ruso Valeri Tókarev a bordo de una Soyuz TMA-7. La nave despegó con éxito del cosmódromo de Baikonur, en Kazajistán, y deberá acoplarse a la ISS mañana.

Olsen, que hizo fortuna fabricando cámaras infrarrojas y fibras ópticas, regresará el 11 de octubre en compañía de la tripulación saliente de la ISS, el ruso Serguéi Krikaliov y el estadounidense John Phillips, en órbita desde el pasado abril. Olsen, que realizará distintos experimentos a bordo de la ISS, ha pagado unos 16 millones de euros y dice que su misión no es de placer, sino de trabajo.

La expedición partió sin que Roskosmos (la agencia espacial rusa) y la estadounidense NASA hayan llegado a un acuerdo sobre el retorno de McArthur, según el jefe de los programas pilotados de Roskosmos, Alekséi Krasnov. "Nuestras obligaciones sobre el transporte de astronautas de la NASA a la ISS han expirado. En teoría, ni siquiera estamos obligado a traer a McArthur de vuelta en una Soyuz dentro de seis meses. Las condiciones de su retorno de la ISS serán discutidas con nuestros colegas de la NASA", dijo Krasnov en Baikonur. McArthur, que se ha marchado con "un billete solo de ida", tendrá que regresar a la tierra en abril seguramente de la misma manera que se marchó, es decir en una nave Soyuz, afirmó el canal de televisión NTV.

Tras los problemas surgidos en la última misión del Discovery, la NASA aplazó los vuelos de sus transbordadores hasta marzo de 2006 como mínimo. El programa de cooperación espacial ruso-norteamericano ha expirado con la misión que se inició ayer en lo que respecta a los vuelos a la ISS y ahora Rusia espera que la NASA obtenga permiso de su Gobierno para contratar nuevos vuelos.

Sin embargo, los acuerdos comerciales entre Rusia y EE UU en el campo de la tecnología espacial se ven entorpecidos por una disposición legal norteamericana, destinada a penalizar a los países que cooperan con Irán, donde Moscú construye una central nuclear. La NASA está haciendo esfuerzos por encontrar una vía legal que le permita comprar tecnología espacial rusa, ahora que concluye el programa de cooperación que contemplaba vuelos gratis a la ISS.