La concentración de la oferta marca la campaña agrícola almeriense

La Consejería de Agricultura presentará el próximo otoño, antes de la 21º edición de la Expo-Agro, un proyecto de concentración de la oferta de la horticultura almeriense, previsto en el Plan Estratégico de la Agricultura para hacer al sector más competitivo. El consenso con todos los agentes implicados se hace indispensable. El debate de la concentración de la oferta contará con un comité de expertos y la administración andaluza jugará un papel de mero observador.

Hasta ahora, el campo almeriense ha sabido autorregular en función de sus expectativas y metas, dibujando y desdibujando un mapa empresarial en constante ebullición. La idoneidad de las miles de explotaciones agrarias de carácter unifamiliar lleva aparejada, sin embargo, un circuito de decenas de proveedores y apenas media docena de compradores que acaban imponiendo los precios. "El problema es que los mismos operadores, cooperativas y alhóndigas no han sido capaces de agruparse no sé si por miedo a perder la autoridad o dejar de tener el espacio de poder conseguido. Aunque hay que reconocer que ahora la situación es diferente a unos años atrás", reflexiona Francisca Iglesias, del sindicato UPA.

Es cierto que el campo almeriense está menos atomizado que hace un lustro. El ejemplo más reciente tuvo lugar la pasada primavera, cuando nació la cooperativa Murgiverde de la unión de Agromurgi y Ejido Verde. Las justificaciones para este matrimonio se plantearon como una "nueva estrategia" para seguir siendo competitivas y ser fuertes de cara al futuro y atender la demanda de los clientes -que cada vez solicitan gama de productos y calendarios más amplios- y a los socios agricultores que piden mayores servicios.

La verdadera revolución en cuanto a fusiones tuvo lugar en la primavera de 2004, cuando la Asociación Provincial de Empresarios Cosecheros-Exportadores de Productos Hortofrutícolas de Almería (Coexphal) se fusionó con los ocho socios que tenía el grupo Aphal. En la actualidad, Coexphal es un gigante que aglutina el 80% de producción del sector productor y exportador hortofrutícola de la provincia de Almería. Esta operación tuvo lugar cuatro años después de que la también comercializadora Agrupaejido absorbiera a Cehorpa para convertirse en la primera comercializadora hortofrutícola de Almería, con casi 300.000 toneladas anuales. Un ejemplo del constante frenesí empresarial que vive el campo almeriense quedaba patente con una noticia ocurrida la pasada semana: tres de los cuatro socios que integraban la sociedad comercializadora Naces abandonaban el grupo. En sus ocho años de vida, es la segunda crisis que vive esta empresa, que ahora busca nuevos socios.

El proyecto de concentración de la oferta que presentará la Junta se ha estructurado en un análisis de los métodos de producción en Almería con una serie de encuestas. Se ha realizado un estudio de comportamiento de las frutas y hortalizas en los mercados de destino en Francia, Reino Unido y Alemania. Y también se ha creado un comité de expertos en torno a la Universidad con especialistas del propio sector y de la gran distribución, la propia administración y entidades financieras, que podrían intervenir con capital. El objetivo es buscar un proyecto de concentración de la oferta en el cual se programen las producciones y se negocie directamente con los mercados de destino con un papel pasivo de la administración. "Pongámonos en un hipotético caso en el que se establezca un proyecto empresarial en el cual se cree un grupo de comercialización. Inicialmente la Junta podría entrar a través de su empresa pública dentro de ese accionariado. Pero no para controlarlo sino para ponerlo en marcha, engrasarlo y en el momento en que eso funcionara, retirarse, como ha hecho en otras ocasiones", explica el delegado de Agricultura, Juan Deus. Llegar a poner a todos los agentes implicados de acuerdo se antoja tarea difícil. El sistema, pese a balances pesimistas, sigue siendo rentable y por eso son muchas las voces que plantean que la solución pase por crear "cuatro o cinco grupos empresariales en Almería fuertes" que comercialicen sus productos. El sector tomará la palabra para decidir su futuro en unas semanas.