Aprobada la declaración de impacto ambiental de la desaladora de Barcelona
El Ministerio de Medio Ambiente dio ayer el visto bueno a las declaraciones de impacto ambiental de la planta desaladora de Barcelona y a la ampliación de la que ya existe en Blanes (Selva).
Respecto a la planta desaladora de Barcelona, que proporcionará 60 hectómetros cúbicos de agua, el ministerio ha aceptado las ocho ubicaciones posibles, todas en el delta del Llobregat. Además, Medio Ambiente concluye que los dos sistemas de captación que se estudian para construir la instalación comportan un impacto ambiental similar. La primera opción sería a través de una tubería submarina y tendría el impacto ambiental concentrado en la fase de obras; el segundo, mediante drenajes horizontales, afectaría al medio ambiente en el funcionamiento de la planta.
Sobre la ampliación de la planta desaladora de Blanes, en el delta del Tordera, el ministerior aclaró que de las tres alternativas barajadas para la captación de aguas, dos tienen efectos mínimos sobre el entorno y la tercera comporta impactos no significativos, siempre que se lleven a cabo medidas correctoras. Con las obras, la desaladora de Blanes duplicará su producción.
