_
_
_
_
_
Reportaje:

De guerrillera a 'superministra'

Dilma Rousseff, nueva 'mano derecha' del presidente Lula en Brasil

Juan Arias

Decididamente, al presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, le gustan los ex guerrilleros como brazos derechos. Sale de su Gobierno, acusado de corrupción, José Dirceu, que fue entrenado como guerrillero en Cuba, y llama para sustituirle a otro de los personajes que se integró en la guerrilla contra la dictadura militar brasileña.

Esta vez, quien se hará cargo del Ministerio de la Casa Civil es una mujer: tras haber militado en los movimientos guerrilleros durante la dictadura y haber sido torturada durante 22 días y encarcelada durante tres años, Dilma Rousseff acabó dedicándose a los estudios de economía monetaria y financiera en las universidades de Río Grande do Sul y de la Unicamp.

Mujer de gestión, de carácter autoritario, Rousseff tiene fama de política enérgica

Tiene un perfil técnico más que político, que es lo que Lula quería en un momento en el que la clase política, salpicada por los escándalos, es la institución con menor índice de popularidad del país.

Cuando Lula la nombró ministra de Minas y Energía, su decisión fue aplaudida por los empresarios. No les decepcionó, ya que resultó ser una de las mejores gestoras del primer Gobierno de izquierdas. Organizó un nuevo modelo de sistema eléctrico, cuyo objetivo era asegurar, sin nuevos apagones, energía para los próximos años, al mismo tiempo que llevar luz a todo el país, y más barata.

Mujer de gestión y de carácter autoritario, Rousseff tiene fama de política y ejecutiva enérgica, incapaz de callarse cuando piensa que alguien se equivoca. Lo hizo incluso con Lula en más de una ocasión.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Ayer, el ministro de Cultura, el músico Gilberto Gil, hizo de la ministra un curioso elogio afirmando que "posee una personalidad fuerte, un lado macho en la forma de ejercer la gestión". Gil añade que lo bueno es que Rousseff "es también mujer" y que eso "va a ser bueno para educar un poco a los políticos brasileños", ya que, según Gil, "la idea de la sociedad es que los políticos tienen que ser muy machos".

Rousseff tuvo varios nombres en la clandestinidad: Estela, Wanda y Patricia. Se casó con el guerrillero Claudio Galeno de Magalhaes, de quien se separó en los años setenta, cuando él se fue a Cuba. Más tarde tuvo como compañero a otro guerrillero, Carlos Franklin Paixão de Araujo, con quien tuvo una hija, Paula. Viven separados.

No le gusta hablar de sus años de cárcel en São Paulo, ni de las torturas que sufrió durante casi un mes. Sus torturadores la llamaban la "papisa de la subversión", la "criminal política" y la "Juana de Arco de la guerrilla". Tenía 22 años cuando fue detenida con documentos falsos. El día de su toma de posesión como ministra del Gobierno de Lula, la dura ex guerrillera lloró en público al recordar a sus viejas compañeras de guerrilla que murieron durante la dictadura.

Rousseff es una política respetada y temida al mismo tiempo. Todos saben que no es capaz de casarse políticamente con nadie. Ella conoce los miedos del entorno de Lula, que hubiese preferido para ese cargo, casi de primer ministro, a un político más flexible.

Dilma Rousseff.
Dilma Rousseff.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_