"Mandar agua a Murcia para riego sería una tropelía"

El socialista José María Barreda sabe que es incómodo al Gobierno. Ayer, en un acto en Pastrana (Guadalajara) ante el príncipe Felipe, declaró que "no se puede crecer dependiendo del agua de otras cuencas". La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, escuchó inquieta al presidente de Castilla-La Mancha. El Ejecutivo debe decidir en julio un nuevo envío del Tajo al Segura.

Después, en una comida con sus colaboradores, Barreda (Ciudad Real, 1953) desarrolla sus argumentos: "Enviar agua a Murcia para riego sería una tropelía. No aceptaremos un trasvase de más de 30 hectómetros, que es lo que Murcia necesita para beber, porque la sequía se puede prolongar y no podemos arriesgarnos a vaciar más los embalses. Para beber, el agua que necesiten, pero no para riego, porque nosotros podemos necesitar el agua dentro de unos meses, pero también Murcia puede necesitarla". Barreda asegura que el Gobierno no puede pedirle que rebaje el tono de sus críticas. El presidente castellano-manchego insiste en que tras la derogación del trasvase del Ebro no hay argumentos a favor del trasvase del Tajo.

En el restaurante, Barreda despliega el mapa del satélite que ha encargado sobre los regadíos en Murcia: un continuo verde salpicado de puntos negros. "Cada punto es una balsa de riego. En estas fotos tomadas por helicóptero se ve más claramente que sí tienen agua, algo que nos falta en Castilla-La Mancha".Barreda denuncia la "demanda ilimitada de Murcia" y asegura que este crecimiento no puede limitar el aumento de población del corredor del Henares, en Castilla-La Mancha, que usa la misma agua. Y afirma que, si el Gobierno aprueba el envío, se opondrá "política y jurídicamente hasta donde sea posible".