La flota del Cantábrico rechaza las ayudas del ministerio y convoca actos de protesta

Los pescadores del Cantábrico rechazaron ayer por "insuficientes" las ayudas que les ofreció el martes el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para compensar la "catastrófica" costera de la anchoa y advirtieron, tras la reunión de las federaciones de cofradías en Santander, de que han decidido pasar de la "pasividad a la confrontación". Mañana se concentrarán en San Sebastián, Bilbao y en puertos de la costa norte para exigir mayores ayudas y un cierre inmediato de esta pesquería ante la carencia de anchoa en los caladeros del Golfo de Vizcaya. En todo caso, no serán éstas las protestas más visibles. Los 3.000 pescadores tienen previsto trasladarse a Madrid para presionar al Gobierno la próxima vez que sus representantes se reúnan con altos cargos ministeriales. El sector ha solicitado que esa cita se produzca el próximo lunes.

La flota de bajura, integrada por 210 barcos, permanece amarrada a puerto desde el pasado 12 de mayo. Su primera intención es presionar al Gobierno central a negociar con Francia en Bruselas un paro biológico de la costera de la anchoa que permita la recuperación de la especie

pero también piden compensaciones económicas. Los pescadores recalcan que sus ingresos han caído proporcionalmente a las capturas y que no les sale rentable salir a faenar.

El ministerio lanzó el martes su segunda oferta para compensarles por esta situación: un paro biológico subvencionable de 45 días, a razón de 1.800 euros por tripulante (con la Seguridad Social a cargo del armador) y entre 12.145 y 45.945 euros por barco según el tonelaje. En total, unos siete millones de euros que el sector, que pide 27 millones, juzga a todas luces "insuficientes". Los pescadores sólo aceptarían esa compensación si el Gobierno les permitiera salir a la mar a pescar otras especies. "Plantean las ayudas desde el 13 de mayo, cuando llevamos ya meses perdiendo dinero", explicó Iñaki Zabaleta, presidente de la Federación de Cofradías de Vizcaya.Los representantes de las federaciones de cofradías del País Vasco, Cantabria, Asturias y Galicia se reunieron ayer en Santander, durante más de cuatro horas, para consensuar una postura común que transmitir al ministerio. No tuvieron que negociar en exceso, porque todos acudían con el mandato expreso de sus pescadores de rechazar la oferta de ayudas realizada por el Gobierno y con un diagnóstico compartido: existe una sobreexplotación de los recursos, agravada por el acuerdo de Arcachon con Francia, y "el Gobierno es el gran responsable" por su "nefasta gestión".

Sobre esos argumentos sustentaron fundamentalmente el escrito que enviaron ayer mismo a la ministra de Agricultura y Pesca, Elena Espinosa, para comunicarle su no a la propuesta y para pedir una reunión para el lunes bajo las siguientes premisas: el cierre inmediato del caladero del Golfo de Vizcaya para la pesca comercial de anchoa durane el 2005, la suspensión del Acuerdo de Arcachon, que regula el reparto de cuota entre España y Francia y que, en su opinión, les ha llevado a "la tumba"; el protagonismo del sector en las negociaciones de los Totales Admisibles de Capturas (TAC) en Bruselas, y mayores indemnizaciones por la escasez de capturas de esta costera.

"Han sido los gobiernos con sus negligencias y con sus TAC de papel los que han hecho que el caladero esté sobreexplotado, como confirman los estudios de los científicos. Y las pérdidas son dramáticas", resaltó Jaime Tejedor, presidente de la Federación de Cofradías de Guipúzcoa. La flota sólo ha apresado en lo que va de campaña 160 toneladas, frente a las 7.500 de otro mal año, 2004, y ha visto caer a 944.000 euros sus ingresos, que suelen rondar los 28 millones de euros por costera. "Tenemos a la gente nerviosa, porque no puede llevar dinero a casa". Tanto, que han decidido pasar de la "pasividad a la confrontación", añadió Tejedor.

La flota de bajura, que continuará amarrada, se concentrará mañana de 12.00 a 13.00 en las dársenas de Santander, Bilbao, San Sebastián y otros puertos del litoral cantábrico, si no se producen novedades en la negociación. No serán los únicos actos de protesta que protagonizarán. Los 3.000 pescadores tienen previsto trasladarse en autocares a Madrid cuando se produzca la próxima reunión entre altos cargos del ministerio y los representantes del sector. Una protesta similar plantearon hace días sin que llegase a cuajar.