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El Superior anula por "arbitrario" el primer plan para construir chalés en Urdaibai

El Tribunal Superior ha dado un fuerte varapalo a la decisión del Departamento de Medio Ambiente del Gobierno vasco de permitir la construcción de más de 20 chalés en el corazón de la reserva de Urdaibai. En una sentencia asegura que la consejería, la institución encargada de proteger esta zona, cometió una "infracción directa" de la ley de defensa de Urdaibai y actuó con "arbitrariedad" y de manera "incongruente" e "incoherente". El fallo es firme, ya que no cabe recurso, al tratarse de una norma autonómica.

El Superior estima una denuncia de la plataforma Ekologistak Martxan contra el plan de urbanización del barrio Kanala, situado entre las marismas y el encinar cantábrico, las dos joyas naturales de Urdaibai. El proyecto fue aprobado por el Gobierno en julio de 2003, tras más de tres años de negociaciones con la Diputación de Vizcaya y los ayuntamientos de Sukarrieta y Arteaga. Era la primera modificación sustancial del plan de protección, desde su aprobación en 1989, para permitir la construcción de más chalés en Urdaibai, donde las edificaciones son sólo posibles en áreas urbanas o núcleos concretos de caseríos con limitaciones. El Ejecutivo justificó la recalificación para dotar a Kanala de saneamiento y otras infraestructuras.

El fallo, dictado el pasado 28 de abril por la Sección Segunda de la Sala de lo Contencioso-Administrativo, acepta los argumentos principales de los ecologistas. Expresa que el Gobierno vasco vulnera el "principio de jerarquía normativa", al decidir sobre el cambio de usos urbanísticos, y agrega que se produce "algo más grave", como es la "infracción directa" de la ley de protección de Urdaibai, lo que supone la "nulidad de pleno derecho" de la actuación del Ejecutivo.

La Sala añade que se incurre en "arbitrariedad" porque no se justifica la necesidad de más suelos urbanos en Kanala para tramitar el cambio urbanístico.El fallo acepta la argumentación de los ecologistas sobre los mínimos aumentos de población previstos en Sukarrieta y Arteaga, a las que pertenece el barrio de Kanala, y la previsión de las normas subsidiarias de ambos municipios de construir entre 150 y 200 viviendas en los próximos años. "La nueva ordenación [urbanística] resulta arbitraria por ausencia de una justificación razonable", señala la sentencia.

Califica de "injustificada" la modificación aprobada al afectar a 13,2 hectáreas de protección del litoral y del encinar cantábrico. "No se justifican que las mismas hubieran perdido los valores que determinaron dichas calificaciones de protección". Y añade que es "incoherente", sin esta justificación, "sacrificar tales valores medioambientales" y que estos suelos, que el plan de protección de Urdaibai "consideraba dignos de protección", tengan una transformación urbanística.

Ekologistak Martxan, que difundió ayer el fallo, opinó que imposibilita al Gobierno ejecutar cualquier plan urbanístico en Kanala y calificó el fallo de "derrota total y absoluta" de un "pelotazo urbanístico". Sus portavoces aseguraron que nadie se opone a solucionar los problemas de saneamiento o de falta de otros servicios en el barrio, "pero para ello no se necesitaba este proyecto".

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Un caso clave

La plataforma sostiene que este caso era clave para el futuro de Urdaibai "porque abría las puertas a futuros cambios del mismo tipo" en otras zonas de la reserva "sometidas a una creciente e insaciable presión urbanística". Los ecologistas señalaron que el fallo "afecta indirectamente" al litigio por el chalé del ex lehendakari y presidente de Euskaltel José Antonio Ardanza, ubicado en Kanala, en el que el Gobierno apreció irregularidades urbanísticas.

El Ejecutivo llevó el asunto a los tribunales por la negativa del Ayuntamiento de Arteaga a subsanar las anomalías. "No decimos que este decreto se hiciese para legalizar las obras del chalé de Ardanza, pero, si se urbaniza la zona, no habrían quedado razones para oponerse a las obras ilegales que ejecutó", según los ecologistas, que, tras esta sentencia, inquirieron a Medio Ambiente si "sigue comprometido" con la protección de Urdaibai.

La consejería, que recibió ayer la sentencia, admitió, en un análisis preliminar, que los argumentos jurídicos "parecen contundentes". "Los respetamos y haremos lo que tengamos que hacer", afirmó un portavoz oficial. Mostró su convencimiento de que el plan urbanístico ahora anulado era "la mejor solución que se había buscado a la situación de Kanala y la más sostenible para Urdaibai". "No tenemos que demostrar nuestro celo por la defensa de Urdaibai", afirmó, antes de destacar que, a diferencia de otros casos en los tribunales, "no se ha producido ningún efecto irreversible" al no haberse iniciado ninguna obra.

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