España es uno de los países desarrollados con mayor desigualdad entre sexos

España es uno de los países con mayor desigualdad entre hombres y mujeres de los 30 que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Ocupa el puesto 22, según el estudio que ayer difundió el Foro Económico Mundial. El trabajo, que mide la igualdad en áreas como el poder político, económico, la educación o la salud, suspende a España por la falta de oportunidades económicas para sus ciudadanas. Cinco países nórdicos, con Suecia a la cabeza, obtienen las mejores clasificaciones, pero tampoco en ellos la igualdad es total.

El Foro Económico Mundial, una organización formada por empresarios y ejecutivos de más de un millar de grandes compañías que organiza la cumbre económica anual de Davos (Suiza), difundió ayer por primera vez un estudio en el que mide los grados de igualdad entre hombres y mujeres en 58 países (los 30 de la OCDE y otros 28 con economías emergentes de los que se dispone de datos fiables). El trabajo tiene en cuenta cinco grandes indicadores que reflejan los niveles de participación y oportunidades económicas de las mujeres, su acceso al poder político, a la educación y a la salud.

- El noveno peor de la OCDE. Con los datos estadísticos de organizaciones internacionales y las opiniones recabadas entre los socios del foro, el estudio establece una clasificación de los Estados en función de sus niveles de igualdad y les da una puntuación del 1 al 7. España, con una calificación de 4,13, ocupa el puesto 27 de la tabla general. Si sólo se toman los 30 países de la OCDE (organización que agrupa a los países más desarrollados), se sitúa en el lugar 22, por delante de Austria, Suiza, Japón, Italia, Grecia, México, Corea y Turquía (ver gráfico).

- Discriminadas en la economía. La peor clasificación española se obtiene en la participación económica que ofrece a las mujeres (puesto 45 en la tabla general y el cuarto peor situado entre los países de la OCDE ). En este indicador se tienen en cuenta elementos como la igualdad de salario a igual trabajo o la presencia femenina en el mercado laboral. También suspende en las oportunidades económicas que brinda a las mujeres (ocupa el lugar 34 en la clasificación general y es el decimotercero con menos facilidades de la OCDE). Bajo este criterio se miden aspectos como la pobreza femenina, la presencia de mujeres en los empleos peor pagados, la penalización laboral por la maternidad o las actitudes contrarias al reparto equitativo de las responsabilidades familiares.

- Educación baja. España también está por debajo de la media respecto a la situación educativa (incluye, además de la escolarización en todos los niveles o el analfabetismo, la brecha digital). En este terreno, ocupa el puesto 35 (el undécimo peor situado de la OCDE).

- Buen nivel de salud. El estudio concede a España una alta calificación en salud y bienestar (quinto puesto global y entre los países de la OCDE). En este capítulo se tienen en cuenta además del acceso a los servicios sanitarios o la maternidad sin riesgos cuestiones como la violencia que padecen las mujeres por el hecho de serlo (agresiones sexuales o de pareja).

- Poder político. El estudio del foro sitúa a España en el puesto 27 al medir el poder político de las mujeres (este indicador tiene en cuenta cuestiones como la presencia de parlamentarias y la existencia de jefas de Estado). Si sólo se tienen en cuenta los 30 países de la OCDE, es el el decimotercero peor situado.

- Quinto peor de la UE. El trabajo, que incluye en su clasificación 24 de los 25 Estados de la Unión Europea (queda fuera Chipre), señala que existen notables diferencias a nivel comunitario: mientras 10 países están situados en los 15 primeros puestos (Suecia, Dinamarca, Finlandia, Reino Unido, Alemania, Letonia, Lituania, Francia, Holanda y Estonia), tres se colocan en los puestos más bajos. Se trata de Malta (puesto 43), Italia (45) y Grecia (50). De los países comunitarios, España es el quinto con menor grado de igualdad entre hombres y mujeres (sólo por delante de Malta, Italia, Grecia y Austria). El informe señala que los niveles de igualdad en los países ex comunistas de Europa del Este reflejan un pasado en el que se estimuló el trabajo femenino.

- Desigualdad mundial "inquietante". El trabajo del foro, Women' s empowerment: measuring the global gender gap (Atribución de poder a las mujeres: medida de la brecha de género), considera "inquietante" que ningún país haya conseguido aún eliminar la desigualdad entre hombres y mujeres. Ante esa situación, el informe advierte: "Los países que no capitalizan todo el potencial de la mitad de sus sociedades están desaprovechando sus recursos humanos y poniendo en peligro su potencial competitivo".

- El "ejemplo nórdico". El Foro Económico Mundial reconoce a Suecia el mayor éxito para reducir la desigualdad (ocupa el primer puesto entre los 58 países estudiados), aunque el informe detalla que en ese país existen problemas de violencia machista. Tras Suecia se sitúan otros cuatro Estados nórdicos: Noruega, Islandia, Dinamarca y Finlandia. Su experiencia es un "excelente ejemplo" de cómo la igualdad favorece la competitividad, según Augusto López-Claros, coautor del estudio y economista jefe del foro. Se trata, por tanto, de un modelo aplicable para reducir las desigualdades. No obstante, el informe niega la calificación máxima (7) a estos países y les da algo más de 5.

- EE UU y Costa Rica. Estados Unidos (en el puesto 17) y Costa Rica (18) son los países americanos mejor clasificados en igualdad por el Foro Económico Mundial. En el primero pasan factura elementos como la falta de permisos de maternidad retribuidos.

- Países musulmanes. De los siete países musulmantes estudiados, cuatro ocupan los últimos lugares. Turquía, candidato a entrar en la UE, es el penúltimo, sólo por delante de Egipto. Bangladesh es el mejor clasificado (puesto 39).