El 42% de las empresas cree que la familia limita el rendimiento femenino

Hacer compatible la vida familiar con la laboral es una cuestión complicada para más de la mitad de las mujeres que cuentan con un trabajo remunerado. Así lo manifiesta el 54,5% de ellas en la encuesta sobre conciliación que ayer difundió el Instituto de la Mujer. El estudio, que también recoge la opinión de 1.000 empresas, revela que en cuatro de cada seis compañías los jefes de personal creen que "las responsabilidades familiares limitan el rendimiento de las mujeres".

El trabajo, titulado Estudio sobre conciliación de la vida familiar y la vida laboral, se ha realizado a partir de 4.000 entrevistas a hombres y mujeres de 16 a 65 años y de una encuesta a un millar de empresas (200 de ellas, con una proporción elevada de empleadas). Revela una visión diferente de la cuestión entre hombres y mujeres.

- Límite al rendimiento femenino. El 42,6% de las empresas creen que las responsabilidades familiares "limitan" el rendimiento de las mujeres. El 66,9% de los jefes de personal considera que la empresa privada debe orientarse sólo a lograr la máxima productividad. El 41,3% dice también que aplicar medidas de conciliación limita la competitividad de las compañías.

- Menor problema masculino. La compatibilidad familiar y laboral es un problema según el 40,6% de los hombres y el 51,2% de las mujeres. En el caso de las ocupadas el 54,4% considera que se trata de una cuestión complicada o muy complicada. Entre las amas de casa lo suscribe el 49,4%.

- Trabajar menos horas. Tres de cada diez personas encuestadas (32%) considera que "la mujer debe trabajar menos horas que el hombre para que pueda ocuparse con mayor intensidad de las responsabilidades familiares".

- Abandono laboral por los hijos. El 45,8% cree que la mujer es el miembro de la pareja que debería abandonar la actividad laboral tras tener el primer hijo.

- Reparto desigual. Las mujeres trabajadoras dedican algo más de tres horas a las tareas del hogar y los hombres empleados, una y media. Ellas destinan más de tres horas y media a los hijos y ellos, casi dos y media.

- Mejor un buen sueldo. En los factores que influyen más para elegir un empleo también se reflejan diferencias por sexo. Las mujeres valoran más el sueldo (21,3%), la compatibilidad con responsabilidades familiares (20,7%) y el interés del trabajo (19,8%). Los hombres eligen el sueldo (31,6%), el interés (21,2%) y las condiciones laborales (18,3%). Sólo para el 9,4% es importante la conciliación con las tareas familiares.

- Peor educación de los hijos. El 63,9% de los hombres y el 56,8% de las mujeres creen que la dificultad de conciliar deteriora la educación de los hijos.

- Derechos y consecuencias. El 51% de los hombres y el 44% de las mujeres creen que el uso de medidas para la conciliación provoca conflictos en el ámbito laboral. El 42% de los que tienen experiencia laboral ha tomado alguna de las posibilidades previstas en la ley como el permiso de maternidad, la jornada reducida (optó a ella un 7,4%) y la excedencia (2,4%). El 11,2% de las mujeres y el 5,9% de los hombres que ejercieron esos derechos asegura que sufrieron consecuencias laborales.

- Horario flexible. Entre las medidas ajenas a la ley de conciliación, la más extendida es el horario flexible de entrada y salida (dispone de él el 36% de las empresas encuestadas). Le siguen el intercambio o elección libre de turnos (31,6%) y el trabajo a tiempo parcial con posibilidad de volver a la jornada completa (26%). Sólo el 5,3% ofrece la posibilidad de trabajar en casa. Las medidas de conciliación figuran en uno de cada cinco convenios.

- Las amas de casa quieren empleo. Según la encuesta, el 66,5% de las amas de casa desearía tener un empleo.