62 expertos analizan en un libro los vínculos entre la medicina y los derechos humanos

Más de siete años y más de 800 páginas le ha costado a Pilar Estébanez, hoy concejal socialista del Ayuntamiento de Madrid y antes figura fundamental de Médicos del Mundo, coordinar la visión de 62 expertos en sanidad y desarrollo sobre el nexo entre medicina y derechos humanos. El resultado ha sido el libro Medicina humanitaria (Ediciones Díaz de Santos) que se presentó ayer en la sede de la Agencia Española de Cooperación (AECI), con presencia de personalidades políticas, sanitarias y de las ONG.

"La medicina humanitaria es otra manera de mirar a quienes sufren", dice Pilar Estébanez. "Viene a ser un matrimonio entre la medicina hipocrática y los derechos humanos. Lo cierto es que en este campo está todo por hacer. ¿Cómo es posible que a un médico se le enseñen fórmulas de bioquímica y no a tratar a un toxicómano, o cómo actuar en cárceles, al pie de las pateras, en campos de refugiados, o la atención primaria en la selva?"

La secretaria de Estado de Cooperación, Leire Pajín, leyó unas palabras del ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Angel Moratinos, que recordaron que "la medicina más humanitaria es la que se concibe como parte de los derechos humanos, cuya defensa es una obligación moral".

"La ayuda humanitaria no sólo es cuestión de aumentar el presupuesto, sino de trabajar a medio plazo en la prevención de conflictos y en la reducción de la vulnerabilidad", añadió Pajín al asegurar que "la ayuda humanitaria está ya en la agenda política".

Fernando Lamata, secretario general de Sanidad dijo que en este tipo de medicina "hay una fuerza revolucionaria que no está de acuerdo con cómo están las cosas". Al acto asistieron figuras políticas como Trinidad Jiménez o Pedro Zerolo, y ex ministros como Julián García Vargas y José Manuel Romay Beccaría, además de responsables sanitarios como Rafael Nájera.