Fraga se niega a debatir con Solbes sobre la inversión del Gobierno en Galicia
Manuel Fraga no quiere debates antes de las elecciones autonómicas gallegas del próximo 19 de junio. El presidente de la Xunta y candidato del PP gallego rechazó días pasados las invitaciones de sus rivales socialista y nacionalista para una confrontación dialéctica y ayer también declinó la oferta que le había formulado el día anterior el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. En una visita a Galicia, Zapatero emplazó a Fraga a que debatiese las quejas de la Xunta sobre las inversiones del Estado en Galicia con el vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía, Pedro Solbes. Sobre los proyectos del Ejecutivo socialista para Galicia "no se debate, se informa", alegó Fraga.
Zapatero realizó su oferta el pasado jueves, durante una conferencia en Santiago de Compostela en la que trató de desmontar las acusaciones de la Xunta y del PP gallego de que su Gobierno "discrimina" a Galicia. Al término del Consejo de Ministros de ayer, la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, reiteró que Solbes se pondrá en contacto con Fraga en los próximos días para estudiar los detalles del debate. "Se podría hacer ante un público especializado, y creemos que sería muy útil y clarificador para los gallegos", explicó Fernández de la Vega.
"Información por escrito"
Antes de la intervención de la vicepresidenta, Fraga ya había rechazado debatir con Solbes. Para el presidente de la Xunta, la controversia sobre las cifras de la inversión del Gobierno en Galicia "no son para un debate, sino para una información por escrito", por lo que pidió al vicepresidente económico que se limite a enviarle una carta con los datos. "Nosotros contestaremos en el mismo terreno", señaló Fraga, quien ayer presentó el lema de la precampaña electoral del PP gallego, que será Máis.
Fraga también replicó a una ironía que había deslizado Zapatero en Santiago, al señalar que el debate con Solbes permitiría a la Xunta "ahorrar dinero en publicidad". El presidente gallego afirmó que la campaña de propaganda de su Gobierno para denunciar los "agravios" de la Administración central fue sólo un modo de contestar a unos anuncios previos del Ministerio de Fomento. "No podíamos quedarnos callados. Y, por cierto, nos ha salido muy barato", concluyó.
Anxo Quintana, líder del Bloque Nacionalista Galego -que ayer también presentó su lema de precampaña, A Galiza nova- reclamó un lugar en el debate si finalmente se celebra.
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