Los ayuntamientos empiezan a abrir oficinas de información para padres

La educación es un servicio que funciona mejor en las distancias cortas. Esta tesis gana cada vez más adeptos en el Ministerio de Educación y los gobiernos autonómicos. En algunas comunidades, como Castilla-La Mancha, Aragón o Cataluña, los ayuntamientos están aumentando su protagonismo en los procesos de la enseñanza y su poder de decisión es cada vez mayor, una política que sienten respaldada por el Gobierno central. En el anteproyecto de la futura Ley Orgánica de Educación (LOE) una disposición adicional indica que "las Administraciones educativas podrán establecer procedimientos e instrumentos para favorecer y estimular la gestión conjunta con las administraciones locales y la colaboración entre centros educativos y administraciones públicas en aquellos aspectos que se considere oportunos".

En Cataluña, la Generalitat ha puesto en marcha oficinas de información escolar con el objeto de facilitar la labor de los padres a la hora de escoger centro para sus hijos. Estas oficinas se encargan de recoger toda la información pertinente sobre las escuelas públicas y concertadas ubicadas en su área de actuación, de forma que las familias tienen la opción, si así lo desean, de acudir a una ventanilla única para informarse sobre la oferta educativa: desde los ciclos de enseñanza al carácter o titularidad de los centros, pasando por los servicios de comedor o las actividades extraescolares.

En Barcelona, el Ayuntamiento y el Departamento de Educación de la Generalitat han unificado la gestión educativa de la ciudad para las etapas de 0 a 18 años. Fruto de esta entente es el Consorcio de Educación de Barcelona, cuyo edificio engloba la oficina de información y la de escolarización municipal, de forma que los funcionarios de ambas administraciones tienen competencias en la admisión de alumnos.

Otra de las comunidades que apuesta por sumar esfuerzos con la administración local es Castilla-La Mancha. Allí también han empezado a funcionar oficinas municipales de escolarización, que informan a los interesados, tramitan solicitudes de plaza en los centros e indican las vacantes existentes. Además, se ha reforzado el papel de los consejos locales de escolarización para ordenar los procesos de admisión en colaboración con la consejería.

El Gobierno de Aragón también ha puesto en marcha seis oficinas de escolarización en la capital, Zaragoza. Fuentes de la Consejería de Educación explican que esta iniciativa responde a la voluntad de ajustar este trámite en una ciudad donde estudia la mayoría de los alumnos de la comunidad autónoma. "Hay que ser muy escrupulosos con la organización de las escuelas", señalan.

En el Departamento de Educación de Cataluña consideran que la disposición de la LOE permitirá en el futuro, además, "dar cobertura jurídica a las oficinas municipales de escolarización", que el Gobierno autonómico ya ha puesto en marcha en casi 40 municipios. Estos centros empiezan también a participar, aunque tímidamente, en las decisiones sobre admisión de alumnos, de forma que los padres pueden iniciar los trámites de solicitud de plaza escolar en estas oficinas, aunque pueden acudir al centro escogido si así lo prefieren. "Se trata de ganar transparencia en los procesos de admisión, y lograr, además, una distribución de los estudiantes más equitativa. Lo que queremos, en definitiva, es acercar la educación al ciudadano", señala Carles Martínez, responsable de Escolarización en el departamento catalán. Algunas asociaciones de padres y patronales educativas de la concertada tildan estas medidas, recogidas en el decreto de admisión de alumnos, de "intervencionistas". De hecho, dichas asociaciones trataron de suspender la aplicación de todo el decreto. El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña ha suspendido cautelarmente tres de sus artículos, uno de ellos referido a las comisiones de escolarización municipales.