El fiscal imputa malos tratos a ocho compañeros de Jokin

La Fiscalía de San Sebastián ha solicitado la apertura de un juicio oral contra ocho alumnos del instituto Talaia, de Hondarribia (Guipúzcoa), a quienes imputa un delito de malos tratos y una falta de lesiones en el caso que se sigue por la muerte de Jokin, el joven de 14 años que se quitó la vida el pasado 21 de septiembre después de sufrir durante meses los insultos y las palizas de un grupo de compañeros. El fiscal pide para estos menores condenas que se concretan en distintas penas de libertad vigilada, además de diversas tareas socioeducativas y prestaciones en beneficio de la comunidad.

La familia, que ejerce la acusación particular, reclama cuatro años y seis meses de reclusión en un centro de régimen cerrado para cada uno de estos ocho menores por un delito de "inducción al suicidio, otro de maltrato y un tercero de lesiones", además de 20 horas de trabajo comunitario por una falta de lesiones.

En otro procedimiento que instruye el Juzgado de Instrucción número 4 de Irún, el juez tomó ayer declaración a los padres del fallecido para ratificar la denuncia presentada contra el director del centro escolar, la jefa de estudios del chico, su tutora y una de sus profesoras, acusados de "dejación" en su responsabilidad de custodia del joven.

En este mismo juzgado declararon el miércoles uno de los tíos de Jokin, su esposa y un amigo de la familia. El primero relató una conversación con el responsable del colegio el mismo día de la muerte del joven. Según su testimonio, el director le admitió que "quizá habían actuado con excesiva lentitud". Hoy comparecerán ante el mismo juez en calidad de imputados el director y tres profesores del instituto.