Blanco seleccionado

En Galicia están descubriendo las bondades del viñedo viejo y sano, con producciones pequeñas de uvas maravillosamente complejas cuando clima y cosecha lo favorecen. Son todavía una gloriosa minoría, en un mar de cepas jóvenes. El problema reside en que esta viña poco productiva sólo es viable si se elaboran con ella vinos de calidad. Resulta ejemplar la labor realizada por Tito Levoso desde la gerencia de la Bodega Vitivinícola de Ribeiro, la mayor cooperativa de Galicia. Aquí hay que gestionar con rigor nada menos que unas 700 hectáreas, lo que es posible gracias a que se ha informatizado plenamente el viñedo, reflejando cada una de las parcelas. Por eso puede seleccionar con garantías. Y crear nuevas líneas, como Colección Costeira, del que resalta su Treixadura Barrica.

Un blanco donde la fruta carnosa se hermana con los tonos de hierbas secas y aromáticas, para fundirse en un leve recuerdo de mantequilla especiada (vainilla). Ligero, pero expresivo, tiene un final noblemente amargo, y suficiente acidez como para evolucionar bien en botella.