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Acuerdo de los líderes del Congreso de EE UU para reconectar a Schiavo

Los líderes parlamentarios de los partidos Republicano y Demócrata alcanzaron a última hora de ayer un acuerdo para reinsertar las sondas de alimento a Terri Schiavo, una mujer que lleva 15 años en coma en EE UU, un día después de que se las desconectaran por orden judicial. El Senado tenía previsto reunirse ayer a última hora de forma extraordinaria para aprobar un proyecto de ley al respecto, mientras que la Cámara de Representantes está convocada para hoy. Las dos cámaras legislativas tenían proyectos diferentes sobre el tema, pero sus líderes lograron armonizar ambas versiones, informa Efe. El proyecto acordado abre una nueva avenida legal a los padres de Terri -la familia Schinder- en su pelea con el yerno -Michael Schiavo- por mantenerla viva. Los Schindler han anunciado su decisión de presentar otra apelación de urgencia en los tribunales federales, en vez de en los de Florida.

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El proyecto legislativo "dará a los Schindler la oportunidad de entrar en los tribunales federales y hacer que un juez federal examine el caso, pero eso puede tardar un poco y obviamente el juez tendrá que hacer colocar el tubo de alimentación de nuevo antes de que analice el caso", explicó Tom Delay, líder republicano de la Cámara Baja. Para alcanzar el acuerdo, los republicanos han accedido a que el proyecto de ley se limite a este caso específico.

Mientras Michael Schiavo pedía ante las cámaras de televisión que los políticos les "dejaran en paz" a él y a su mujer, la madre de Terri, Mary Schindler hacía un llamamiento urgente a todas las fuerzas sociales y políticas, y en especial al presidente Bush, para que "impidan el asesinato" de su hija. "No permitan que la maten de hambre y sed, no es una persona conectada a tubos como se ha hecho creer, sólo necesita comer por sonda, pero trata de comunicarse".

Los tribunales han aceptado el diagnóstico de los médicos de Michael de que Terri padece un "estado vegetativo persistente", que explicaría los actos reflejos que los padres interpretan como intentos de comunicación. La familia filmó un vídeo a escondidas del yerno en el que Terri aparece sentada y gesticulando en aparente respuesta a su madre. Las imágenes, repetidas hasta la saciedad estos días en la televisión, han servido de acicate a las organizaciones pro-vida, que ayer continuaban la manifestación, o vigilia religiosa como ellos la denominan, iniciada días atrás frente al hospicio donde está Terri.

Si la justicia no vuelve a intervenir, Terri morirá en un una o dos semanas. Las sondas se han desconectado y reinsertado en dos ocasiones anteriores, 2001 y 2003, a lo largo de esta saga judicial que comenzó hace ocho años, siete después de que Terri sufriera daños neurológicos cerebrales tras un ataque de corazón provocado por un desequilibrio de potasio. Los pleitos empezaron cuando el marido solicitó la eutanasia. Los padres le han acusado de inventarse repentinamente que Terri le había pedido que no la mantuvieran artificialmente viva para quedarse con una indemnización millonaria y casarse con otra mujer, con la que vive desde entonces y tiene dos hijos.

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