Marruecos impone medidas proteccionistas contra el azulejo español

Marruecos ha decidido exigir un certificado de calidad que en Europa es voluntario y retener el producto en los puertos por su supuesto mal etiquetado para bloquear la entrada de azulejos españoles, según denunció ayer la patronal valenciana del sector Ascer, que asegura ver la presión de la industria cerámica marroquí tras esas medidas "proteccionistas". Ascer considera "grave" el daño que se produce a las exportaciones españolas.

"Grave" es el calificativo utilizado por la patronal cerámica para describir el daño que dos medidas adoptadas por la administración marroquí están causando en las exportaciones españolas de baldosas al citado país. Según fuentes de la Asociación Española de Fabricantes de Azulejos y Pavimentos Cerámicos (Ascer), ambas medidas forman parte de "una ofensiva de carácter proteccionista solicitada por la industria marroquí". Pese a que, de momento, la patronal cerámica desconoce la cantidad de producto bloqueado en las aduanas y el número de empresas afectadas, durante 2004 las exportaciones de cerámica a Marruecos alcanzaron los 25,5 millones de euros y la repercusión de las medidas, hasta el momento, podría elevarse a más de 2 millones de euros.

Según las mismas fuentes, desde hace aproximadamente un mes, las autoridades aduaneras están solicitando un certificado de calidad de acuerdo a la Norma Internacional IS0 13.006 sin el que no se permite el despacho aduanero de la mercancía. Esta exigencia, demandada como "obligatoria" es de carácter "voluntario" en la Unión Europea. Aún así, según las mismas fuentes, el producto que cuenta con éste es bloqueado en los puertos marroquíes con alegaciones sobre el mal etiquetado o la deficiente identificación de las normas de calidad. Para los fabricantes, la aplicación de la norma como obligatoria está siendo "arbitraria", ya que no se ha abierto un mínimo plazo de adaptación para las importaciones. Además se han detectado casos en los que se rechaza la mercancía sin aclarar con precisión los motivos, ni proporcionar información adecuada que permita realizar el despacho aduanero con celeridad y garantías suficientes. "Se trata, además, de una aplicación discriminatoria, lo cual es todavía más grave, pues los fabricantes marroquíes están en la actualidad comercializando sus productos sin cumplir con la misma", indicaron ayer las mismas fuentes.

Ésta no es, en cualquier caso, sino la segunda parte de un proceso iniciado el 24 de enero sobre la apertura de un proceso de salvaguardia contra la importación de baldosas cerámicas españolas. Marruecos alegó que el incremento de importaciones puede suponer un daño a su industria local. Así, el 1 de marzo se celebró una audiencia pública en Rabat en la que las partes afectadas pudieron exponer sus argumentos. La patronal cerámica acudió junto con la Oficina Comercial de España en Rabat y la delegación de la Comisión Europea en Marruecos, que argumentaron que la exportación española no compite con el producto marroquí. Según fuentes de Ascer, en la audiencia pública "sí se demostró el importante incremento de las importaciones de origen chino y los bajos precios a los que se está vendiendo su producto en Marruecos".

La exportaciones españolas suponen el 60% de las importaciones de cerámica en Marruecos, un país que se encuentra al alza en el ranking de destinos del producto español y que, actualmente se sitúa en el decimocuarto puesto. En cualquier caso, según fuentes de la patronal cerámica, Marruecos es el mercado más importante de África.