El presidente de Bolivia invita al líder indigenista a negociar

Respaldado por miles de personas que ayer se manifestaron en las principales ciudades del país, el presidente boliviano, Carlos Mesa, advirtió de que aplicará la ley a los autores y responsables de los bloqueos de carreteras. Mesa, quien no quiso emplear la expresión mano dura, invitó a dialogar a su más encarnizado rival, el dirigente del Movimiento Al Socialismo (MAS), Evo Morales, con quien pretendía reunirse anoche.

Unas 10.000 personas se dieron cita en la plaza Murillo, en el centro de La Paz, para secundar el llamamiento de Mesa al fin de los bloqueos. Portando banderas bolivianas y pañuelos blancos, los manifestantes exigían al presidente "mano dura" contra los responsables de los bloqueos, y en especial con Morales. "Evo debería pensar en los que trabajan la tierra y que no pueden vender sus productos porque se pudren en los bloqueos", destacaba un vecino de La Paz. "Le rogaría a este señor Evo que deje de molestar. Si es un sindicalista, que deje el Parlamento", opinaba otro manifestante.

Minutos después del mediodía se asomaba al balcón del Palacio de Gobierno el presidente de la República portando una bandera boliviana en la mano. "Este pueblo ha tenido la paciencia de aguantar y soportar a unos pocos y ha dicho basta", señaló Mesa, mientras era aclamado por los manifestantes. "No queremos otra cosa que construir la paz. No queremos que este país esté controlado por unos pocos, porque estamos dispuestos a seguir adelante sin que nadie nos estrangule".

En las últimas horas se ha multiplicado en Bolivia la petición al Gobierno de que aplique medidas de fuerza contra los bloqueos, algo a lo que se ha opuesto Mesa. "Transformemos la palabra dura por justa y apliquemos mano justa a los bloqueadores. La mano de la justicia es implacable con los que vulneran la ley. Vamos a enseñar respeto y tolerancia a los irrespetuosos e intolerantes", subrayó el mandatario, quien terminó su discurso cantando el himno boliviano completo.

Ayer Bolivia estaba semiparalizada por la presencia de 39 puntos de bloqueo repartidos por todo el país, en especial en la ruta que conecta dos de las ciudades más importantes: Santa Cruz y Cochabamba. A pesar de las advertencias de aplicar la ley, la policía no trató de romper los bloqueos. Aunque cargó con violencia contra una manifestación de transportistas en Santa Cruz en la que un reportero de la televisión local fue apaleado por los manifestantes. Las negociaciones en cambio dieron resultado en la ciudad de El Alto, donde el líder local, Abel Mamani, aceptó levantar los bloqueos y sentarse a negociar con los representantes del Gobierno.

Aprovechando el respaldo popular e institucional del que goza estos días, Mesa invitó a Morales a reunirse con él para tratar de llegar a un acuerdo. El dirigente cocalero primero exigió disculpas públicas al presidente por haberle atacado personalmente en su carta de dimisión presentada oficialmente el pasado lunes. "No quise injuriar ni agraviar a nadie; si lo he hecho así, le pido disculpas públicamente", afirmó Mesa en la madrugada de ayer ante la prensa internacional. Cumplido este requisito, Morales exigió la presencia de otros movimientos, como centrales sindicales, en el encuentro, a lo que el Gobierno respondió que dicha reunión ya estaba prevista.