La comisión investigará primero el accidente del Carmel y aplaza los casos de corrupción

La comisión de investigación constituida en el Parlamento catalán celebró ayer su primera sesión aprobando un listado de 28 comparecientes que deberán arrojar luz sobre las causas del hundimiento del túnel de las obras del metro en el barrio del Carmel. Los grupos decidieron aplazar para dentro de un mes la segunda tanda de comparecencias relacionadas con la gestión de la obra pública en Cataluña. La comisión tampoco pudo hacer públicos los nombres de los siete técnicos que asesorarán a los parlamentarios al no haber encontrado a expertos independientes dispuestos a participar en los trabajos.

La primera sesión de la comisión de investigación parlamentaria sobre el Carmel, de carácter preparatorio, duró más de dos horas y media y sirvió a los grupos para definir -a puerta cerrada- el plan de trabajo que seguirán en los próximos dos meses y consensuar, no sin dificultades, una lista de los 28 primeros comparecientes. Éstos deberán contribuir, con sus declaraciones, a esclarecer las causas que llevaron al hundimiento del túnel de la línea 5 de metro a su paso por el barrio barcelonés del Carmel.

El primero en comparecer -lo hará el próximo lunes- será el consejero de Política Territorial, Joaquim Nadal, junto a altos cargos de su departamento. A partir de entonces, el resto de seleccionados estarán obligados por ley a dar su testimonio. Entre ellos se encuentran diversos responsables de la empresa pública Gestión de Infraestructuras (GISA), incluidos los dimitidos Jordi Julià, director general de Puertos y Transportes en funciones, y Ramon Serra, presidente de GISA, también en funciones. El antecesor de Nadal en el cargo, el convergente Felip Puig, también deberá comparecer.

A la lista se suman los responsables de planificar y ejecutar la obra del metro, entre ellos Agustín del Castillo, gerente de Transportes Metropolitanos de Barcelona y un gerente de la Unión Temporal de Empresas (UTE), todavía por concretar. Diversos técnicos expertos en el subsuelo del Carmel y representantes de los vecinos, comerciantes y afectados del barrio completarán la relación de comparecencias. Todos ellos deberán abordar las causas del accidente del Carmel aunque, según un destacado miembro de la comisión, no se eludirán preguntas sobre el sistema de adjudicación de la obra pública durante los anteriores gobiernos de Convergència i Unió. Y en este caso Felip Puig es un testigo de excepción.

Sin embargo, los diputados que conforman la comisión decidieron postergar, en concreto para dentro de un mes, una nueva lista de comparecientes que deberán dilucidar el otro gran interrogante de la comisión: las posibles irregularidades en la gestión de la obra pública en Cataluña en el periodo 1999-2005. Un destacado miembro de la comisión se expresó convencido de que la investigación encontrará irregularidades en los contratos de obra público, pero se mostró escéptico respecto a la posible clarificación del presunto cobro de comisiones ilegales, el famoso 3%. En todo caso la Sindicatura de Cuentas de la Generalitat [homóloga del Tribunal de Cuentas] mostró su disposición a colaborar con la comisión.

Según el presidente de la comisión, Joan Boada (ICV-EUiA), la relación de comparecientes está abierta. Un miembro de la comisión alertó, no obstante, de "la intención de algún partido de ampliar el objeto de la comisión de investigación", algo que "no ocurrirá", según explicó, en alusión a CiU, que podría solicitar que se investigue también el sistema de adjudicación de obras en el Ayuntamiento de Barcelona.

Faltan expertos

Los parlamentarios también fueron incapaces de hacer público el nombre de los siete expertos, entre profesionales del derecho, la obra pública, la geología o la economía que asesorarán a los diputados. Según explicó Boada, un ingeniero todavía no ha confirmado su disponibilidad. El presidente explicó las dificultades que han tenido los grupos para conseguir el concurso de los expertos y reconoció que tuvieron que ampliar la lista inicial de doce candidatos. Boada agregó que los seleccionados "estaban encantados" con la idea de participar en la comisión, pero que "el único problema" es "su actividad profesional".

Los nombres definitivos se darán a conocer en la sesión de mañana, aunque los grupos deberán examinar posibles incompatibilidades ya que alguno de los expertos citados trabaja o ha colaborado para alguna de las empresas objeto de esta investigación parlamentaria. La comisión se reunirá, en principio durante dos meses, tres días a la semana.