El 'sí' vence por mayoría aplastante en un referéndum que registra una abstención del 57%

El cuarto referéndum que se celebra en España desde la Transición se saldó ayer con una victoria aplastante del sí a la Constitución europea (un 76,73%, frente a un 17,24% de votos en contra) y con la participación más baja (apenas un 42,32%) registrada hasta ahora en este tipo de consultas (la abstención superó ayer el 57% mientras que la más alta de todas las citas anteriores fue del 40,58%, en el plebiscito sobre la OTAN).

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, principal impulsor de la convocatoria del referéndum, el primero que se celebra en Europa (otros nueve países seguirán los pasos de España), se sintió ayer muy agradecido con el resultado. "Hoy hemos hecho historia de Europa, porque todos los países esperaban con mucha atención nuestra respuesta. A esos países les digo: os invitamos a seguir el camino que hemos iniciado en España. Este voto afirmativo es una forma de decir a Europa 'gracias'. He recibido la llamada del presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso, que me ha pedido que transmita la felicitación al pueblo español".

Zapatero: "El resultado hace más fuerte a España en Europa y más fuerte a Europa"

País Vasco, Navarra y Cataluña son las autonomías con más votos en contra

El PP culpa al presidente del Gobierno del "fracaso" por la elevada abstención

Un 76% de los votantes apoya el Tratado, mientras que el 17% lo rechaza

Zapatero resaltó que en la consulta de ayer "nadie" había perdido. "Ha ganado Europa, ha ganado la Constitución europea y ha ganado España. Todos saben que mi empeño ha sido llevar a España al corazón de Europa; en ese viaje he sentido el apoyo y el aliento de millones de españoles de todos los colores políticos, por eso quiero expresarles mi satisfacción y gratitud".

Los resultados por comunidades reflejaron algunos datos dispares. El rechazo a la Constitución europea fue más alto en aquellas autonomías donde hay mayor presencia de nacionalistas. El País Vasco, con un 33,66% de sufragios negativos, encabeza esa lista, por delante de Navarra (29,22%) y Cataluña (28,07%).

Respecto a la participación, las dos ciudades autónomas, Ceuta y Melilla, fueron las más abstencionistas, con más de un 70%, seguidas por las dos comunidades insulares, Canarias (63%) y Baleares (66%). La comunidad con más porcentaje de votos afirmativos fue Extremadura (85,19%), que también ganó al resto en el porcentaje de participación (49,88%).

En los últimos comicios europeos, las formaciones políticas que ahora han pedido el sí en el referéndum sumaron casi el 90% de los sufragios. Ayer tan sólo alcanzaron el 76,73%. Los partidarios del no sumaron el 17,24% de sufragios mientras en las últimas elecciones europeas apenas lograron el 10%. Ayer, otro 6% de los votantes eligió la papeleta en blanco.

Algunas de las coaliciones que se formaron para acudir a la cita electoral del 13 de junio de 2004 se han desunido ahora a cuenta de su posición respecto a la Constitución europea. Así, de los tres partidos que se presentaron como Galeusca (Bloque Nacionalista Galego, Partido Nacionalista Vasco y Convergència i Unió), tan sólo los gallegos optaron por el rechazo al Tratado.

Ha ocurrido algo parecido en coaliciones de Gobierno, donde también ha habido división de opiniones ante el referéndum. En el Ejecutivo tripartito vasco, el PNV se ha quedado solo a favor del sí. En el Gobierno catalán, el PSC también ha sido el único en defender el voto afirmativo.

Uno de los socios del tripartito catalán, Esquerra Republicana, llegó a vaticinar que la aprobación en referéndum de la Constitución europea supondría "borrar del mapa a Cataluña y diluirla en un gran magma". Ayer ganó el sí por amplísima mayoría, aunque en Cataluña los votos en contra casi agruparon a un tercio de las personas que acudieron a las urnas. Esquerra se atribuyó en exclusiva ese resultado.

El principal enemigo del Ejecutivo central era ayer la abstención. En el porcentaje de electores que prefirió quedarse en casa cifraban los principales partidos políticos el éxito o el fracaso de la convocatoria.

El referéndum se hizo efectivo apenas ocho meses después de las últimas elecciones, también de alcance europeo, donde la participación se quedó en un escaso 45,94%, el peor registro en la historia de los comicios de este tipo celebrados en España. Entonces, el Partido Popular saludó los resultados como un éxito (se quedó a dos puntos del PSOE) y apenas concedió importancia a la baja participación. "Los resultados refuerzan la España constitucional", declaró el presidente del PP, Mariano Rajoy.

Ahora, la percepción fue muy distinta. El PP, que tuvo que esforzarse durante toda la campaña en convencer a los ciudadanos de su apoyo a la Constitución europea, mantuvo que cualquier participación por debajo del 50% sería un fracaso del Gobierno y del presidente José Luis Rodríguez Zapatero. Los populares también hicieron campaña por toda España, como el PSOE, y organizaron centenares de actos para movilizar a su electorado. Pero ayer no se sentían concernidos por la participación en el plebiscito.

Fracaso del convocante

El secretario general del PP, Ángel Acebes, se encargó de la primera crítica, a las 20.05 de ayer: "El nivel de participación ha sido muy bajo en comparación con otros referendos. De 29 referendos que han existido en Europa sobre distintas materias, sólo uno ha estado por debajo, en Irlanda, del resultado de participación que hoy ha existido en España. Ha sido la participación más baja en ninguna convocatoria nacional que se haya celebrado hasta ahora en España".

En las últimas elecciones al Parlamento Europeo, la abstención fue más alta que la registrada ayer en España, en 13 de los 25 países de la Unión.

Acebes, cuyo partido ha asegurado que trabajaría para pedir a su electorado que acudiera a votar en el referéndum, cargó sobre las espaldas del Gobierno todas las culpas por la baja participación: "Es un fracaso de quien convocó y quien lo hizo fue el señor Rodríguez Zapatero. De cada 10 españoles a los que el presidente del Gobierno les ha pedido que fueran a las urnas, sólo han ido cuatro. Pero dicho eso, quiero transmitir la felicitación a todos los españoles. A los que han ido a votar y a los que no".

Mariano Rajoy, presidente del PP, habló dos horas después. Primero, lanzó un mensaje institucional: "El PP está muy satisfecho con este resultado. Quiero dar las gracias a todos, y especialmente a los militantes de mi partido por el esfuerzo que han hecho, y a los votantes del PP por su contribución a este triunfo. Sin su participación y su ejercicio de responsabilidad, este resultado no se hubiera producido". E inmediatamente después, pasó al ataque contra el Gobierno: "La participación ha sido muy baja. Zapatero quiso ser un modelo para el resto de Europa y se precipitó. Esta participación no es modelo para nadie, porque supone un fracaso. Espero que en el futuro se actúe con más rigor y con menos interés personal y partidismo".

Promover el 'no'

Le contestó José Blanco, secretario de Organización del PSOE, que culpó al PP de favorecer la abstención e, incluso, de promover en algunos lugares de España el voto en contra de la Constitución europea: "El PP lleva muchos años pidiendo la abstención. Recordamos cómo muchos ministros del PP regañaron a los españoles por participar en las pasadas elecciones generales. Entre los votos en contra, está el sector radical de la derecha del PP. A título de ejemplo, puedo informar de que en los distritos madrileños donde el PP sacó en las últimas elecciones un 70% de voto, Salamanca, Chamberí, Chamartín o Retiro, ayer el voto en contra superaba en diez puntos a la media de Madrid. Y en el barrio de La Moraleja [zona de viviendas de lujo en las afueras de Madrid] el no ha tenido un 37%".

Zapatero se declaró "muy satisfecho" con el hecho de que "14 millones de españoles hayan acudido a las urnas" y que "11 millones hayan dado un respaldo a la Constitución europea".

"Es una participación cercana a las últimas elecciones europeas. El pronóstico sobre el sí lo compartía toda la ciudadanía española, había falta de competitividad en lo que podía ser el resultado. Con todo, el respaldo es muy amplio y muy bueno para España. Hace más fuerte a España en Europa y más fuerte a Europa", agregó el presidente.

María Teresa Fernández de la Vega, vicepresidenta primera del Gobierno, resaltó que ayer fue "una jornada festiva para la democracia en España" y agradeció la participación de los ciudadanos.

Entre ellos, la familia real española, que acudió a las urnas. Es la cuarta vez que lo hace; nunca ha dejado de participar en los referendos convocados en España. Los reyes don Juan Carlos y doña Sofía votaron nada más abrir el colegio electoral de El Pardo (distrito madrileño en el que se ubica el palacio de la Zarzuela). Los Príncipes de Asturias lo hicieron horas más tarde.