Voto agradecido en el olivar

A media mañana, Fuerte del Rey (Jaén) tenía ayer toda la apariencia de un pueblo fantasma. Hacía sol pero sus calles, sobrias y alargadas, estaban solitarias. Sólo en las inmediaciones de la plaza del Ayuntamiento se podían divisar algunos carteles electorales que recordaban la cita con las urnas. A las 11.30 resultaba difícil ver a algún joven en un municipio ya de por sí envejecido, donde más del 60% de sus 1.200 habitantes tienen más de 45 años y casi el 40% son jubilados. Quizá por ello la afluencia a las dos mesas electorales ubicadas en el colegio público Nuestra Señora del Rosario, era, fundamentalmente, de personas mayores.

No es que los vecinos exhibieran demasiado entusiasmo al acudir a las urnas, pero en Fuente del Rey presumen de registrar unos índices de votación superiores al 90% en todas las elecciones. Aquí se entiende como una cuestión de responsabilidad. La misma que demuestra Andrés Barrera López, un jubilado de 74 años, que se quitó su boina antes de emitir su voto, en un gesto de cortesía y de respeto muy habitual entre los mayores del medio rural. Como Andrés, la mayoría de los vecinos son conscientes de la importancia que ha tenido Europa para el olivar, el cultivo sobre el que gira la economía de este pequeño pueblo. "Todo el mundo que tenga olivar debe venir a votar y apoyar el sí", aseguraba convencido Manuel. "Hasta ahora nos ha ido bien y hemos progresado", corroboraba Juan.

A la misma hora que Manuel y Juan acudían a votar, Francisco Montoro, un joven de 34 años, pasaba por la puerta del colegio electoral con su tractor cargado de leña. Iba sudoroso y cansado de trabajar en la corta de las olivas, una faena que sigue a la recolección. Se fue a las siete de la mañana, como si de un día cualquiera se tratara, porque en la agricultura no existen los domingos. Francisco sólo tenía ganas de llegar a su casa para ducharse y descansar; lo de votar lo dejaba para la tarde. "Claro que votaré sí, porque creo que hasta ahora las ayudas comunitarias nos han ido muy bien. Si nos las quitaran no sería rentable el olivar", aseguraba este olivarero en la puerta de la cooperativa Virgen del Rosario, que este año ha molturado seis millones y medio de kilos de aceituna, a los que hay que añadir otros siete millones y medio en la otra almazara, la de San Isidro. 14 millones que contribuyen a las 400.000 toneladas de aceite de oliva producidos en Jaén en esta campaña, lo que da derecho a unas ayudas comunitarias de 421 millones de euros en la provincia, una cantidad como para tenerla en cuenta.

"Si Zapatero y el otro lo dicen, creo que será algo bueno". Juan José y Ana, un matrimonio de jubilados no tenían reparo alguno en desvelar su voto afirmativo en el referéndum sobre el Tratado europeo. No acertaban a razonar su apoyo. Se escudaban en el mensaje que han escuchado de los dos grandes partidos, PSOE y PP, que son los únicos con representación municipal en esta localidad. En Fuerte del Rey no se ha celebrado ni un solo mitin electoral de los partidarios del no, y tampoco se escucha a nadie con una opinión crítica sobre la futura Constitución europea.

Quizá por ello, María Dolores Benítez, un ama de casa que preside por primera vez la mesa electoral, no vislumbraba demasiada emoción en el recuento de las papeletas. A su lado, María José Rayo, interventora del PSOE, admitía que había "menos salsa" que en las elecciones municipales, donde ella misma fue candidata.

Al final de la jornada habían votado 593 vecinos, el 60,5% del censo electoral de Fuente del Rey; una participación casi 20 puntos por encima de la media andaluza. El sí cosechó el 80,9% de los votos.