_
_
_
_

La insurgencia secuestra al arzobispo de Mosul

El portavoz del Vaticano, Joaquín Navarro Valls, informó ayer del secuestro del arzobispo sirio-católico de la ciudad de Mosul (al norte de Irak), Basile Georges Casmoussa. "La Santa Sede deplora firmemente este innoble acto terrorista y pide que este digno pastor sea devuelto incólume a su ministerio", dice el comunicado de Navarro Valls.

Un sacerdote que solicitó no ser identificado informó que el secuestro del responsable de la comunidad cristiana católica en Mosul se produjo cuando éste se encontraba caminando delante de la iglesia Al Bishara, en un barrio del este de la ciudad. Al parecer, un hombre armado obligó al arzobispo a entrar en un vehículo y desde entonces nada más se ha vuelto a saber de él.

Más información
La insurgencia vuelve a atentar contra el principal partido chií de Irak
Liberado el arzobispo católico secuestrado ayer en Mosul
Irak cerrará todas sus fronteras un día antes de los comicios por cuestiones de seguridad

La cadena de televisión qatarí Al Yazira informó del secuestro del patriarca de la comunicada sirio-católica de la ciudad, pero no dio detalles. Los sirio-católicos son una antigua comunidad que cuenta con unos 75.000 fieles, la mitad entre Kirkuk y Mosul.

Dos 'marines' muertos

A dos semanas de las elecciones, la violencia en Irak no da tregua. Dos marines estadounidenses fallecieron tras un atentado en la región de Al Anbar, informa Frances Presse. El Ejército admitió las bajas en un comunicado, pero evitó ofrecer detalles sobre lo sucedido. Desde el domingo la cifra de muertos por la ola de violencia en Irak superaba las 80 personas. La acción más espectacular de ayer costó la vida a 10 personas tras un ataque suicida con coche bomba contra el cuartel central de la policía en Banji, al norte de Bagdad.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Cerca de Baquba, al noreste de la capital, la insurgencia asesinó a ocho soldados iraquíes en un control de carretera. El atentado fue reivindicado por los seguidores de Abu Musad al Zarqaui, aliado de Al Qaeda. "Éste es el destino de los colaboradores de los judíos y los cruzados", decía el comunicado de los terroristas.

Además, hubo ataques a varias escuelas en las que se prevén instalar mesas electorales y de nuevo los insurgentes atentaron contra los chiíes, cuya plataforma política tiene muchas posibilidades de ganar los comicios: en Numaniyah, al sur del país, un pistolero mató en un Internet café al hijo del político chií Habib Salman, colaborador del gran ayatolá Alí al Sistani.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_