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LA LUCHA CONTRA EL TERRORISMO

Tres inmigrantes integrados desde hace años en la vida del barrio

Sant Andreu de la Barca y Mollet son localidades del cinturón industrial barcelonés con una alta concentración de inmigrantes. Los tres detenidos llevaban varios años en Cataluña y se habían integrado en la vida de barrio, según dijeron los vecinos, que mostraron su sorpresa por las acusaciones.

Majid Bakkali vivía desde 2000 en la calle de Sant Llop de Sant Andreu de la Barca, junto con dos familiares que fueron liberados por la Policía.

"Sobre las tres de la mañana tiraron la puerta abajo con fuertes golpes. Nada más entrar nos golpearon con la culata de la pistola en la cabeza", explica Mohammed Hallich, empleado en el doble negocio de locutorio y carnicería que regentaba Bakkali en la avenida de la Carretera.

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Hallich llevaba ayer una venda que tapaba una brecha en su frente y se apreciaban marcas en las muñecas causadas por las cinco horas que pasó esposado en el comedor junto a Salah Boudount, el otro ocupante del piso. Mientras, explican, Bakkali era interrogado en el otro extremo de la casa. Un sobrino del detenido comentaba que éste "había trabajado siete años de peón para poder abrir el negocio".

El segundo detenido, Abdelkader Farhaoui, vivía en la calle de Riera Canals junto con su hermano y las esposas de ambos. A los cuatro les despertaron las llamadas de la policía al timbre de la puerta. Su hermano asegura que lo tumbaron en el pasillo y registraron toda la casa. "Se llevaron un montón de papeles, sobre todo los contratos de trabajo".

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"Vascos sí, ETA no"

Farhaoui llegó a Sant Andreu hace una década. Poco después montó una carnicería, que traspasó el año pasado. "Desde entonces se ganaba la vida como podía", explicó su hermano, que no entiende cómo han podido acusarle de terrorista. Una vecina sostenía que sus relaciones con los cuatro "siempre han sido buenas".

Mohamed Douha, el tercer detenido, ocupaba desde hacía dos años un piso en Mollet. "Escuchamos un ruido y pensamos que eran ladrones o una explosión de butano", recordaba su mujer. "Él siempre ha condenado el terrorismo. Es un malentendido", aseguraba su hermano.

La consejera de Interior de la Generalitat, Montserrat Tura, subrayó la diferencia entre "islam y terrorismo", recordando la consigna de "Vascos sí, ETA no" que se repetía en las manifestaciones de hace años. Tura aseveró que Cataluña es "uno de los lugares por donde se mueven e instalan algunos terroristas islamistas". A su juicio, éstos encuentran ciertas "facilidades" para moverse en Europa occidental, lo que exige "coordinación" entre los cuerpos policiales.

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