Economía recorta 85 millones del presupuesto inicial de Salud

Un total de 3,05 euros por persona y día. Éste es el gasto previsto por el Gobierno catalán en materia sanitaria para 2005. El anteproyecto de presupuesto, aprobado ayer y sujeto aún a modificaciones, prevé para Salud un gasto de 7.088 millones de euros, el 9% más que este año. Las partidas para farmacia y la compra de servicios a hospitales concertados son las que más suben a la espera de que en 2005 se pacte un nuevo sistema de financiación.

"Nos encontramos ante el mejor presupuesto posible con el actual sistema de financiación". Ésta era la valoración que hacía un alto cargo del Departamento de Salud, ayer, horas antes de que el consejo de dirección del Servicio Catalán de la Salud diera el visto bueno a las cifras del segundo presupuesto sanitario elaborado por el Gobierno tripartito.

Y lo que está claro es que no contentará a todos, dadas las expectativas creadas por el Ejecutivo catalán. La partida de farmacia aumenta el 6,96% respecto a este año, pero fuentes del sector lo consideran insuficiente puesto que este año ya se cerrará con el 7% de incremento, un punto por encima de lo previsto inicialmente. Aún así, el capítulo de farmacia se llevará la nada desdeñable cifra de 2.050 millones de euros. O lo que es lo mismo: Cataluña gasta en fármacos dos de cada siete euros dedicados a la sanidad. Controlar este aumento será la clave para cerrar el año con más o menos déficit.

Los grandes incrementos del gasto farmacéutico se prevén en los hospitales. Para la red de centros gestionados por el Instituto Catalán de la Salud se prevé un aumento del 14,4% de la factura farmacéutica. En los hospitales concertados el aumento alcanzará el 20%. Estos crecimientos se explican por el aumento de la cirugía ambulatoria, el envejecimiento de la población y la aparición de nuevos fármacos en el mercado, casi siempre más caros.

Impulso al sector concertado

El resto de partidas están mucho más controladas, sobre todo el gasto en personal, recogido en el capítulo I del presupuesto, que aumenta el 7,6%. En total se lleva 1.417 millones.

Los conciertos con los centros gestionados por consorcios y hospitales privados constituyen la tercera gran partida presupuestaria, con 2.807 millones de euros, el 10,4% más que en el año anterior. Con ello, el departamento dirigido por Marina Geli pretende dar un impulso a los centros de la Red de Hospitales de Utilización Pública, muy endeudados con los bancos e inmersos en una permanente crisis financiera. El gerente de la Unión Catalana de Hospitales, Boi Ruiz, valoró ayer este presupuesto, aunque recordó que no habrá una solución definitiva mientras no haya un nuevo sistema de financiación de la sanidad pública. "Este incremento presupuestario no soluciona los problemas que arrastramos, pero al menos nos ayuda a no incrementar más el déficit acumulado", explicó Ruiz.

Uno de los problemas que deberán afrontar los actuales gestores del Departamento de Salud, que ayer no quisieron hacer ninguna valoración, es la falta de fondos para los proyectos que prometió el Gobierno tripartito. Farmacia, personal y los conciertos sanitarios se llevan el 85% del total del presupuesto. Además, cerca del 95% del presupuesto global está ya comprometido para hacer funcionar el conjunto del sistema. En este momento nadie sabe a ciencia cierta de dónde saldrá el dinero para hacer frente a las anunciadas reformas.

Por tanto, todas las esperanzas están puestas en el año 2005, cuando el Gobierno catalán prevé arrancar un acuerdo para un nuevo sistema de financiación que desahogue una sanidad catalana que arrastra un déficit cercano a 3.000 millones de euros. Mientras esto no ocurra el Departamento de Economía seguirá haciendo recortes a las peticiones que le llegan desde Salud. Este año, por ejemplo, el consejero de Economía, Antoni Castells, ha recortado 85 millones del proyecto inicial que le remitió Marina Geli. Un portavoz de Economía argumentó ayer este recorte alegando que responde "a la lógica de toda negociación entre dos interlocutores".

Uno de los éxitos que se apuntan los actuales gestores del Departamento de Salud es acabar el año actual sin apenas pasarse del presupuesto. Si las previsiones no fallan, el año se cerrará con un déficit del 0,47%, lo que supone 30 millones de euros por encima de lo presupuestado. En ejercicios anteriores el déficit había sido de hasta ocho puntos, lo que suponía añadir a la deuda global de la sanidad más de 300 millones de euros anuales.