Delincuencia y Ley de Extranjería

Las cifras oficiales son las que son: el 68,6% de los detenidos en Barcelona en los primeros nueve meses de este año son extranjeros. En el caso de Ciutat Vella, el porcentaje aumenta hasta el 79%. El motivo de estas detenciones es mayoritariamente el haber cometido un delito o una falta (66,9%), seguido de la aplicación de la Ley de Extranjería (22,1%) y reclamaciones judiciales (11,8%). Los porcentajes son prácticamente idénticos a los del año pasado, y en cifras absolutas son 11.732 detenciones por delinquir, 3.927 en aplicación de la Ley de Extranjería y 2.096 por reclamaciones de los jueces.

El delegado del Gobierno en Cataluña, Joan Rangel, reclama prudencia a la hora de analizar estos datos y deslindar la extranjería de la delincuencia: "El nuevo reglamento permitirá normalizar la situación de las personas que quieren trabajar en la legalidad en España y eso nos permitirá centrarnos en combatir la delincuencia, la cometa quien la cometa".

Una opinión muy distinta tiene Carles Bertran, coordinador del Centro de Información de Trabajadores Extranjeros (CITE), dependiente de Comisiones Obreras. "Una parte importante de las personas que explotan a los extranjeros también son delincuentes y a ésos ni se les detiene ni tenemos datos de cuántos son y cómo actúan", asegura.

El mayor colectivo de extranjeros detenidos son marroquíes (2.634 detenciones), seguidos de los ecuatorianos (1.503), los argelinos (1.029) y los rumanos (952). Los dos primeros son también los grupos más numerosos entre la población extranjera que vive en Barcelona. Bertran admite que no se ha realizado un análisis serio sobre cómo se ha llegado a esta situación, pero tiene claro que "la política de los Gobiernos del PP con los extranjeros no les ha facilitado mucho las cosas para normalizar su situación".

De ninguna manera, añade Bertran, se puede justificar la delincuencia, pero explica que en ocasiones es la única salida que le queda a una persona que debe seguir subsistiendo.Bertran también añade otro factor para explicar ese dato, como es el posible recelo y diferencia de trato que pueden tener los agentes de policía respecto a un ciudadano en función de sus rasgos faciales y del color de su piel.

Las cifras oficiales indican que de las 17.755 detenciones realizadas en los nueve primeros meses de este año, 12.171 fueron de extranjeros. Por sexos, 10.529 hombres y 1.642 mujeres.

Dejando de lado el asunto de la extranjería, las cifras oficiales muestran otros datos que, cuanto menos, resultan singulares y se repiten desde que se inventó la delincuencia. Existe una persona que acumula 24 detenciones en estos nueve meses del año. Otros dos ciudadanos han sido detenidos en 18 ocasiones, dos más acumulan 17 arrestos y otro ha sido apresado 15 veces. Y así un largo rosario de cifras, especialmente cuando se baja de la decena de detenciones. Los reincidentes en ocho ocasiones son 22, y 26 ciudadanos han sido detenidos siete veces. Otras 1.190 personas acumulan dos detenciones, y la gran mayoría sólo una. Son 12.409.