UGT y CC OO critican el papel del Ejecutivo vasco en la crisis de Izar

Los máximos representantes de UGT y CC OO en el País Vasco, criticaron ayer al Gobierno vasco y a los sindicatos nacionalistas y les atribuyeron cierta responsabilidad en los ataques que sufrieron las sedes de UGT en Barakaldo y la de CC OO en Sestao. En las pintadas que dejaron los asaltantes se podía leer: "No vais a cerrar La Naval" y se les acusaba de "vendidos".

El secretario general de UGT-Euskadi, Dámaso Casado, cree que el Gobierno vasco y su portavoz, Miren Azkarate, "incitan con sus declaraciones al vandalismo y la división de los trabajadores de La Naval". Casado acusó ayer al Ejecutivo de Vitoria de "empecinarse en criticar todas las salidas que se intentan negociar, sin tomar ninguna iniciativa ni participar en ninguna solución".

El secretario general de CC OO de Euskadi, Josu Onaindi, reclamó ayer que no se instrumentalice políticamente el problema de La Naval, "porque esto lleva a una confrontación como la que está ocurriendo". El Gobierno vasco respondió a las críticas negando que su posición contraria a la segregación de Izar provoque violencia o vandalismo y recomendó a UGT y CC OO que reflexionen porque según dijo un portavoz "yerran el tiro" al oponerse a la "reclamación de sus propios afiliados" de mantenerse en el sector público.