Un libro analiza el impacto del 'boom' literario en España

Se dieron a conocer como el boom y se convirtieron tempranamente en maestros de la narrativa contemporánea. La voluminosa miscelánea La llegada de los bárbaros (Edhasa), un trabajo colectivo impulsado por los críticos literarios Joaquín Marco y Jordi Gracia, repasa en más de mil páginas la trascendencia que tuvo en la literatura española la irrupción, entre los años sesenta y setenta, de escritores latinoamericanos como Mario Vargas Llosa, Guillermo Cabrera Infante, Carlos Fuentes, Gabriel García Márquez o Alfredo Bryce Echenique. El fenómeno se completó con la divulgación de la obra de otros narradores ya prestigiosos, aunque minoritarios: Jorge Luis Borges, Miguel Ángel Asturias, Alejo Carpentier, Ernesto Sábato, Julio Cortázar o Juan Rulfo, autores que se dieron a conocer a un público más amplio gracias al tirón de sus discípulos.

Los materiales recopilados en el libro son dispares, desde estudios breves de distintos aspectos del boom a reseñas de las novelas y entrevistas a sus protagonistas publicadas en la prensa de la época. "La literatura no es política, pero en el franquismo la literatura no podía escapar de la política. Los escritores hispanoamericanos trajeron aire fresco. Los lectores descubrieron en sus libros un realismo antirrealista y cierta rebeldía. Nos enseñaron que la literatura no sólo era algo testimonial, sino también creación y exigencia", explicó Marco en la presentación del libro en Barcelona.

Josep Pla, Rafael Conte, Carmen Martín Gaite, Juan Luis Cebrián, Jean Michel Fossey, Terenci Moix o Robert Saladrigas son algunas de las firmas que se suceden en el estudio.

Puente hacia París

Muchas de las páginas del libro dejan constancia del interés de los escritores latinoamericanos del boom por establecerse en España, especialmente en Barcelona. "Veían en la Barcelona de aquella época un trampolín hacia Europa. París era la meca a alcanzar y Barcelona era el puente natural. Además, aquí trabajaba la agente literaria Carmen Balcells, muy ligada en sus inicios a Carlos Barral. La editorial Seix Barral ocupa un papel decisivo en el lanzamiento de estos escritores", dijo Marco, testigo del nacimiento del boom por sus responsabilidades editoriales en el sello de Barral. Otra de las figuras a las que se le reconoce un lugar destacado en la difusión de los autores del boom fue Juan Goytisolo, quien ocupaba un puesto decisivo en la influyente editorial francesa Gallimard.

"Su repercusión fue inmediata. Los miembros del jurado del Premio de la Crítica, capitaneado inicialmente por Juan Ramón Masoliver y Guillermo Díaz-Plaja, se preocuparon por los autores americanos, superiores en calidad a los españoles. Ningún escritor local podía competir por entonces con García Márquez o Vargas Llosa", apuntó el editor.

La llegada de los bárbaros arranca en la década de 1960 y acaba su recorrido en 1981, año en el que el fenómeno literario latinoamericano está ya consolidado.