El Gobierno destina a gasto social la mitad del Presupuesto para 2005

Los Presupuestos del Estado para 2005 entraron ayer en el Congreso de la mano del vicepresidente segundo y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, para iniciar un trámite parlamentario que durará hasta final de año, y para el que el Gobierno no cuenta aún con apoyos suficientes. Son las cuentas de una nueva etapa, la del Gobierno de Rodríguez Zapatero, con tres objetivos básicos: la estabilidad presupuestaria, la productividad y la transparencia.

Un año más, la Seguridad Social tendrá un superávit (0,7% del PIB) que permitirá compensar el déficit del Estado (0,5%) y de las comunidades autónomas (0,1%). El gasto del Estado y la Seguridad Social (234.915 millones) crecerá un 6,5%. Más de la mitad (50,1%) se destinará al gasto social, que crece un 9,5%, con especial atención a la vivienda (32,9% de aumento). Los sueldos de los funcionarios subirán un 3,5%.

Los ingresos aumentarán un 6,4%, hasta 233.526 millones, gracias a una previsión de recaudación de impuestos y de cotizaciones sociales que para Solbes "no es optimista, sino prudente". Habrá una actualización de la tarifa del IRPF (2%), también de los impuestos especiales de alcohol y tabaco, y una subida de las tasas (2%). Solbes aseguró que no habrá subida de la presión fiscal, si por tal se entiende aumento de impuestos.

El riesgo para estos Presupuestos es que el crecimiento económico previsto (3%) se vaya al traste por la escalada del precio del petróleo, que ayer alcanzó un nuevo récord histórico (rozó los 47 dólares por barril). El ministro de Economía persiste en su objetivo de 2% de inflación y dijo que esperaba el mantenimiento de los tipos de interés (2%) por un plazo "relativamente duradero".

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