_
_
_
_
52º FESTIVAL DE CINE DE SAN SEBASTIÁN

'Rejas en la memoria' rescata del olvido a los vencidos de la guerra

Palacios presenta su documental en Zabaltegi

Rocío García

"Hay que buscar el consenso para que se abran las tumbas del pasado y darle nombre y apellido a esas tumbas y a la realidad". Lo dice Jorge Semprún en el documental Rejas en la memoria, que, dirigido por Manuel Palacios, rescata del olvido a los vencidos de la guerra de España y descubre los cientos de campos de concentración y los miles de prisioneros que proliferaron bajo la dictadura franquista. Y también las torturas y fusilamientos durante interminables años. Poco antes, el propio Semprún recuerda el "pacto de amnesia y de olvido para reconstruir el futuro", vivido en nuestro país en la transición. El olvido y las concesiones, añade Santiago Carrillo. "Hicimos muchas concesiones. La del olvido fue la más terrible, pero si no la hubiéramos hecho no viviríamos hoy en democracia", confiesa el que fue secretario general del PCE.

Las víctimas del franquismo dicen 'No a la venganza, sí al reconocimiento'
Más información
La polémica de la comida basura llega a San Sebastián

Rejas en la memoria, a cuya presentación ayer en San Sebastián acudieron Santiago Carrillo y dos presos políticos del franquismo, Miguel Núñez y Gervasio Puerta, es una producción de Sogecable y Pirámide, que cuenta algo que pocos conocen: la historia de los vencidos. "Yo soy sólo el que mira. No he pretendido contar las dos historias. La de los vencedores ya se ha hecho. Me he dedicado a los vencidos y qué mejor que lo cuenten ellos mismos", explica Palacios, de 43 años y obsesionado desde siempre por rescatar la memoria de tantos miles de españoles. Y tal y como cuenta, Palacios ha dado la voz a los protagonistas. Por Rejas en la memoria desfilan prisioneros de guerra, ya octogenarios, pero también historiadores -"que dan rigor y peso a los hechos"- (Paul Preston, Santos Juliá o Javier Tussell), políticos (Alfonso Guerra, Felipe González o Jorge Semprún) y periodistas (Iñaki Gabilondo, Juan Luis Cebrián, Luis María Anson).

Son las víctimas las que piden salir del silencio. "Venganza no, reconocimiento sí". Eso es lo que van destilando a lo largo de la hora y media que dura el documental -un resumen de más de 200 horas de grabación-. "Su historia es tristísima", dice Palacios, "pero al final el mensaje es positivo, quieren que los jóvenes aprendan de ello para que no ocurra nunca más". "Son incansables, luchadores, me he encontrado con unos hombres y mujeres con una energía y una esperanza realmente envidiables", añade el realizador.

Rejas en la memoria, que se estrenará en las salas de cine y en Canal +, da cuenta de los 100 campos de concentración existentes en nuestro país -el último se cerró en 1962, dice Nicolás Sánchez Albornoz - y del medio millón de personas recluidas en algunas de las prisiones, colonias o destacamentos penitenciarios que proliferaron por toda España. Toda una realidad que se ha empezado a conocer y estudiar a fondo a raíz de la desclasificación a finales de los años noventa de numerosos archivos militares y de documentación procedente del Ministerio de Justicia. Unos papeles donde se da cuenta minuciosa de todos los campos de concentración, los trabajos que realizaban los presos y los nombres y apellidos de todos ellos, y que ocupan paredes y paredes de un edificio en Ávila.

Y los recuerdos, que esos sí que no aparecen en los papeles. "El hambre se resiste, la sed no", dice Josep Subirats. O el caso de Dolores Viñes, mujer de un preso, un día de mucho frío a las puertas de la cárcel. "A unas les cogía por los pechos, a otras les tocaba el culo o las piernas. 'Mire usted, a mí no se le ocurra tocarme', le dije al carcelero de mi marido. 'Pues, ¡ea!, ahora ya no ve a su marido'. Y me fui sin verle".

Y como la historia, dice Palacios recordando palabras de Iñaki Gabilondo, no hay que reescribirla sino borrarla y escribirla de nuevo, Rejas en la memoria utiliza el recurso de la tiza y la pizarra. Palabras en blanco que se van borrando y escribiendo sobre un fondo negro.

De izquierda a derecha, Gervasio Puerta, Miguel Núñez, Manuel Palacios y Santiago Carrillo, a la salida de la presentación en el Festival de Cine de San Sebastián del documental <i>Rejas en la memoria,</i> dirigido por Palacios y en el que intervienen Puerta, Núñez y Carrillo.
De izquierda a derecha, Gervasio Puerta, Miguel Núñez, Manuel Palacios y Santiago Carrillo, a la salida de la presentación en el Festival de Cine de San Sebastián del documental Rejas en la memoria, dirigido por Palacios y en el que intervienen Puerta, Núñez y Carrillo.JESÚS URIARTE

Valor educativo

Una ovación cerrada, larga y en pie, de un público mayoritariamente joven, es el mejor regalo que ayer se llevaron a casa tres hombres, octogenarios ya, tras la proyección del documental Rejas en la memoria. Para Santiago Carrillo, Miguel Núñez y Gervasio Puerta, represaliados todos de la dictadura franquista, el objetivo final de su apoyo y participación en el filme es el de que su historia, la historia de los vencidos, sea conocida ya por los jóvenes para que aquella tragedia no se vuelva a repetir nunca. "Hemos entrado en el siglo XXI con más nubarrones quizás que en el XX, por ello debemos de afrontar con valentía, dignidad e inteligencia los retos de la defensa de la libertad y los valores del debate, la discusión y la fraternidad", aseguró Núñez, que se presenta a sí mismo como ex preso. "Es incuestionable el valor educativo de este filme, el camino en la formación de la conciencia de las nuevas generaciones", añadió Carrillo. "Que se vea en los colegios y universidades", pidió Puerta, presidente de la Asociación de Presos Políticos Antifranquistas.

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_