La jugosa provocación de 'Shrek 2'
La película recaudó 1,2 millones de euros en su primer día de exhibición en España
En 1994, los estudios DreamWorks prometieron ser la "casa del talento" y albergar una producción de filmes únicos y que dejaran huella. Les ha costado toda una década, pero finalmente Shrek 2 parece cumplir las palabras de sus fundadores. Si su predecesora, Shrek, se convirtió en un fenómeno mayor del que nadie podía anticipar, un lucrativo negocio que DreamWorks calcula en unos 1.000 millones de dólares de beneficios, la continuación de las historias de este ogro verde se ha transformado en el filme de animación más taquillero de la historia de Estados Unidos, también arrasando en la taquilla internacional. En España, en su primera jornada de exhibición recaudó 1,2 millones de euros. Shrek 2 confirma además la tendencia y el estilo de este estudio que ha encontrado en la animación 3-D las pautas para su triunfo. "Hemos tomado la clara decisión de dedicarnos a la animación por ordenador dado el tipo de historias que estamos contando, su costo más razonable y las demandas de mercado", ha subrayado Ann Daly, responsable de la división de dibujos animados de los estudios DreamWorks.
En esta ocasión su mordacidad se dirige hacia todas las áreas de la cultura popular
'Shrek' supo encontrar a su público entre los más pequeños y los adultos
Desde su nacimiento, hace ahora una década, los estudios DreamWorks quisieron separarse del modelo narrativo seguido por Disney en sus películas de animación, aunque soñando con dominar ese mercado hasta ahora copado por la factoría de Mickey Mouse. Tanto Shrek como, ahora, su continuación parecen haber logrado ese deseo, aunque haya sido a costa de tomarle el pelo a Disney. Más que en su técnica de animación, algo rudimentaria comparada con la de otros estudios dedicados al 3-D, como Pixar, Shrek supo encontrar a su público entre los más pequeños y en lo que aún queda de infancia en los adultos, con unas tramas que combinan una narración convencional de cuento de hadas con el humor sofisticado propio de los mayores.
Tres años más tarde, Shrek 2 ha evolucionado en la calidad de su animación así como en su humor, y si la primera no hizo más que sacarle punta a Disney, en esta ocasión su mordacidad se dirige hacia todas las áreas de la cultura popular, desde Justin Timberlake hasta Beverly Hills pasando por Starbucks o las boutiques de Armani, aunque sin olvidarse nunca de reírse de sus rivales. Una evolución que también ha costado más cara, con un precio de producción que si bien DreamWorks no quiere confirmar, podría estar en los 120 millones de dólares. Pero en Estados Unidos la película se va acercando a los 400 millones de dólares en la taquilla, muy por encima de los 267 millones de dólares que consiguió su predecesora en los cines estadounidenses.
Es un éxito que DreamWorks no piensa dejar escapar al haber comenzado a trabajar en un Shrek 3, e incluso en una posible cuarta entrega. Además, la preferencia del público por el nuevo personaje del Gato con Botas, al que Antonio Banderas ha prestado su voz, le llevará a protagonizar un largometraje centrado en su totalidad en este felino, cuya mejor arma son sus grandes ojos de Bambi. Los estudios también explotarán su nueva fórmula en otras producciones, todas ellas por ordenador, como la sátira de mafiosos con forma de pez titulada El espantatiburones, que, con las voces de Will Smith, Renée Zellweger, Angelina Jolie, Martin Scorsese y Robert de Niro, tiene su estreno previsto el 1 de octubre. "Será una isla de humor familiar en medio de un océano de películas serias", describió un representante de marketing en DreamWorks. Otras producciones que ya están en marcha incluyen Over the edge, basada en una popular tira cómica y que tendrá la voz de Jim Carrey, y Madagascar, sobre animales del zoo de Nueva York perdidos en la selva de Madagascar, todas ellas en animación por ordenador, una técnica que también aplican a su nueva serie de televisión Father of the pride, sobre una familia de tigres blancos que vive con los magos de Las Vegas Siegfried y Roy (y que ha continuado su producción pese al accidente sufrido por el segundo en las garras de uno de sus animales).
Con este éxito el estudio espera superar una década desigual en sus previsiones económicas, en las que sus deseos de convertirse en una empresa multimedia se han visto pasados por agua. De hecho, el sello discográfico tuvo que cerrar, como ocurrió con su división en el campo de los videojuegos, e incluso en aquellas ramas que han dado beneficios, como la producción de largometrajes de imagen real y de animación, también han tenido que superar desastres como el de Simbad, película de dibujos animados que apenas superó los 26 millones de dólares en la taquilla.
El sentimiento dentro del estudio es que el triunfo de Shrek 2 pone fin a un periodo de vacas flacas del que piensan sacar aún más provecho ante los rumores de que con la llegada del otoño DreamWorks cotizará en Bolsa, ofreciendo acciones de su división de animación con el deseo de atraer una capitalización millonaria como la que consiguió Pixar en esta década.
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