La continuidad de la crisis del sector textil causó el pasado año la pérdida de un 14% del empleo

El sector textil prosigue su declive vertiginoso en Andalucía, donde el año pasado, según datos de la Federación Textil Andaluza, perdió más de 11.000 empleos, el 14% de los casi 80.000 puestos de trabajo que generan las 2.200 industrias existentes en toda la comunidad. El traslado de fábricas a Marruecos, China o a los países del Este, con costes de producción muy inferiores, así como la tendencia a la concentración en grandes grupos empresariales y la proliferación de talleres ilegales son las grandes amenazas para un sector que reclama ayudas urgentes.

"La situación es francamente caótica y el proceso de desmantelamiento parece imparable", señaló Juan Miguel Rodríguez, presidente de la Federación Textil Andaluza. A su juicio, mientras el 95% del sector lo acaparan las pequeñas y medianas empresas, se da la paradoja de que la distribución está concentrada en tres grandes grupos empresariales: El Corte Inglés, Cortefiel e Inditex que, a su vez, importan el 85% de su producción.

Ese escenario, sostiene Rodríguez, ha llevado a muchas empresas de manufacturas a convertirse en importadoras para poder subsistir en un mercado marcado por una feroz competitividad.

El gremio de empresarios de la Federación Textil Andaluza vaticina que en los próximos cinco años podrían desaparecer muchas de las principales empresas de manufacturas por no poder competir con la mano de obra mucho más barata de los países del Este europeo y, sobre todo, del Sureste asiático. La misma suerte han corrido ya muchas industrias del algodón y la lana en municipios de Cádiz y Sevilla.

Por si fuera poco, el acuerdo marco alcanzado el pasado mes de octubre por el Gobierno central con la patronal del sector y los sindicatos UGT y CC OO todavía no ha echado a andar. El acuerdo prevé medidas excepcionales de ayuda al sector, pero los pequeños empresarios lamentan las duras exigencias impuestas.

El hecho de que el 80% de la plantilla de las empresas deba tener contrato fijo indefinido para poder optar a las ayudas (pago de salarios por la Seguridad Social y las comunidades autónomas durante los tres primeros meses de la actividad) es algo que, según Juan Miguel Rodríguez, "es muy difícil que puedan cumplir las pequeñas industrias". La Federación Textil Andaluza pretende entrevistarse en breve con dirigentes de la Consejería de Empleo de la Junta de Andalucía para abordar esta problemática.

La Junta de Andalucía aprobó el pasado mes de octubre un plan integral para la industria del sector textil y la confección de la provincia de Jaén, una provincia en la que se han perdido más de 3.000 puestos de trabajo en la última década.

Cierres de empresas

El parlamentario jiennense de IU José Cabrero recordó que, hace tan sólo tres años, marcas como Levi's o Cortefiel centraban su actividad productiva en Jaén, pero en los últimos meses han cerrado sus puertas dos empresas emblemáticas como Carolina Punto, de La Carolina, y Secopal, de Canena, que llegó a contar con 1.200 trabajadores. En la actualidad, la provincia de Jaén cuenta con cerca de 400 pequeñas y medianas empresas que mueven al año algo más de 100 millones de euros.Según un informe elaborado por la Cámara de Comercio de Jaén, basado en una encuesta realizada a las industrias y comerciantes textiles de la provincia, durante el pasado año sólo un 25% de los encuestados disponía de diseño propio. En cuanto a la comercialización de los productos, el 40% de los encuestados se limitaba a trabajar de manera continua para una gran empresa y el otro 60% restante comercializaba directamente su producción.

Con respecto al destino de los productos, más de un 32% manifestó que la producción de sus empresas se destina al mercado provincial; el 30%, al nacional; y el 23%, al regional. El 15% restante declaró vender en la Unión Europea y países extracomunitarios.

Con todo, el mayor peso del sector se da en la provincia de Málaga, donde se generan 3.000 empleos, se factura unos 150 millones de euros y se exporta en torno al 10% de su producción, fundamentalmente a la UE, los países árabes y Cuba. La provincia malagueña lidera el sector en Andalucía con un 18% del total de la actividad.