El olivar
¿Por qué no se calla o le mandan cerrar la boca al exministro y jerezano popular Arias Cañete? Siempre que habla sube el aceite. Como nos sobraba dinero, pues a pagar los crímenes de guerra en Irak. Señor, señor, qué guerra. Y lo hemos tenido de ministro. Así le fue y nos fue a los andaluces. Nueve meses tuvo para no malograr más el asunto de la OCM del aceite, y las reformas del algodón y tabaco. ¿Recuerdan ustedes algo importante de su paso por el Ministerio de Agricultura? Los olivareros andaluces, algodoneros y tabaqueros están haciendo una colecta para levantar un monumento al citado Arias Cañete en la campiña jerezana, para loor y gloria del mismo y sus herederos.
Ya es una tomadura de pelo que personas tan serias y preparadas como el senador del PP por Málaga, Damián Caneda, afirme sin rubor que el Gobierno del PSOE olvida al campo andaluz, no recordando los ocho años últimos que ha gobernado Aznar (el PP único) en La Moncloa, con dos ínclitos ministros, Loyola de Palacio y Arias Cañete. Caneda debe conocer Andalucía sólo desde las nubes.
El entonces consejero de Agricultura de la Junta, Paulino Plata, se cansaba de repetir, con datos, que en los últimos años el olivar andaluz había sido penalizado en un 40%. Su sucesor, Pérez Saldaña, no se muerde tampoco la lengua y aun siendo un problema a solucionar por el Gobierno central, el autonómico ya ha dicho que Bruselas no puede seguir penalizando, y de qué forma, al país que más aceite produce.
Otros temas:
¿Qué pintan en el consejo de RTVA dos políticos como Zoido (PP) y Centella (IU)? Pregunta hecha en un foro de periodistas. Los dos se quedaron sin trabajo y hubo que buscarles donde seguir comiendo de la sopa boba. Y encima, Zarrías, guasón él, se rasgaba las vestiduras porque de su consejería sale la sopa.
Málaga está de enhorabuena. El futuro metro empieza a sonar bien. Que el arquitecto Pezzi tenga el encargo de dirigir uno de los tramos más conflictivos reconforta el espíritu. Francisco de la Torre, pasado el sarampión, recobra su habitual estado de ánimo.
Tranquila, señora Martínez. Quedan tres años, o más, como diría Rajoy, para poner nervioso al presidente Chaves.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.