Pixar encabeza la lista de los 100 más poderosos de Hollywood

Los estudios Pixar son el sueño de Hollywood, todo éxitos y ni un solo fracaso en toda su producción, un logro que la industria ha sabido reconocer otorgando a sus cabezas visibles, Steve Jobs y John Lasseter, el título de los más poderosos del lugar. Una lista que anualmente prepara la revista Premiere y que agrupa a los cien mandamases del cine estadounidense. El año pasado la encabezó Steven Spielberg, que ha descendido al segundo puesto porque durante 2003 no tuvo ningún estreno, algo que cambiará con la llegada de The terminal, una carta de amor a los inmigrantes en Estados Unidos. Pese a sus crisis, los estudios Disney han logrado situar en un tercer lugar a Richard Cook y Nina Jacobson, dos de sus principales directivos, quizá más que por sus logros en la pantalla por la posibilidad, remota, de que Michael Eisner acabe abandonando la dirección de la empresa y pueda pasar a nuevas manos. Mucho más sonada es la presencia del director Peter Jackson en la sexta posición, rodeado de premios Oscar tras su victoria con la trilogía de El señor de los anillos y marcando un hito económico con su King Kong, película que le dará 20 millones de dólares y el 20% de los beneficios como si fuera una estrella. Otro multimillonario, en el puesto número 10, es Mel Gibson, cuya pasión por el cine y la religión ha sido hasta la fecha la mejor inversión en la taquilla.

A juzgar por la lista, parece que en la actualidad la dirección paga mejor que la interpretación porque los dos actores mejor situados en este listado, Tom Hanks y Tom Cruise, se han mantenido en los mismos puestos del pasado año, el 13 y el 14. Otras han perdido puntos, como Julia Roberts, aún la actriz más poderosa de Hollywood según el listado, pero ahora en el puesto 25 tras su decepcionante La sonrisa de Mona Lisa y en un momento en el que Nicole Kidman y Renée Zellweger le están comiendo el terreno en el drama o la comedia, respectivamente. La principal novedad del año la ofrece Johnny Depp (en el puesto 31), siempre ausente de estos listados por su talante bohemio, artístico, sí, pero de escaso poder en la taquilla. Una imagen que ha desaparecido con los 362 millones de dólares que recaudó Piratas del Caribe sin salir de Estados Unidos, además de la primera candidatura al Oscar de su carrera. Will Ferrell ha vivido el mismo ímpetu, salido de la nada hasta llegar al puesto 51 con la comedia Elf, otro caso en el que el dinero manda en especial si la recaudación es de 257 millones de dólares. Además del dinero, el Oscar también tiene algo que decir en estas ocasiones, como atestiguan Charlize Theron (80) y Sofia Coppola (89) con sus últimos estrenos, Monster y Lost in translation, respectivamente.